Bradenton (Lunes, 10-12-2018, Gaudium Press) Millie Francis es una mujer católica de 85 años de edad que reside en una casa rodante en Bradenton, Florida, Estados Unidos. Fácilmente pasaría desapercibida entre los más de 22 millones de americanos que viven en casas rodantes en el país, pero su historia llegó a los medios de comunicación cuando la administración de la propiedad en la reside le exigió que retirara una imagen de la Virgen de Guadalupe pintada en una pieza de madera que sustituye una de sus ventanas. «Tendrán que matarme antes», indicó la mujer a los medios de comunicación locales. «No le van a decir a esta anciana qué es lo que debe hacer».
El mural de la Virgen de Guadalupe que amenaza con ser retirado en Bradenton, Florida. Foto: Actuall. |
La controversia al parecer llegará a las cortes, ya que la administración, a través de sus abogados, le impuso un tiempo límite de 30 días para retirar la imagen, justo antes de la fiesta de la Virgen de Guadalupe, que se conmemora el día 12 de diciembre. Francis, al no tener conocimiento legal ni recursos para abogados, recurrió a su parroquia, que la puso en contacto con el capítulo local de los Caballeros de Colón.
La historia de la imagen en disputa es sencilla, y parecería que no suscitaría un enfrentamiento legal. Francis pidió autorización a la administración del predio para realizar el reemplazo de uno de los cristales de su casa rodante por una pieza de madera con el fin de bloquear el sonido de un vecino ruidoso y las luces de los vigilantes que le molestaban en la noche. El permiso le fue concedido con la única condición que la obra fuera terminada antes del 31 de octubre. Durante una Eucaristía a la que asistió, la creyente decidió cómo decorar la madera que ocuparía el lugar de su ventana: «Yo no quiero decir que tuve una visión ni nada como eso, pero me sentí iluminada y recibí la inspiración de Nuestra Señora de Guadalupe de pintar su imagen», recordó Francis para el informativo Bradenton Herald. «Así que le prometí que lo haría».
Sus vecinos han decorado sus casas con todo tipo de motivos, por lo cual asumió que no habría problema con la imagen mariana. «Hay todo tipo de cosas aquí, pero esto (la orden de retiro) es debido a que soy católica y eso está mal», denunció la anciana. «Con todas las cosas que están mal en el mundo, creería que hay cosas más importantes de las cuales preocuparse». La mujer afirmó que la imagen no ofende a nadie y que no hay ninguna regla en la propiedad que imponga restricciones sobre la decoración de las viviendas. La agencia católica CNA pidió a la administración una copia del reglamento de la propiedad, pero no recibió ninguna respuesta.
«No se nada de estas cosas legales», indicó Francis a Bradenton Herald. «Ellos dicen que debo pagar las cuotas de los abogados si ellos ganan en la corte. No tengo cómo pagar eso. Necesito ayuda y no sé lo que me pueda pasar, pero lo que sí sé es que no voy a retirarla».
Con información de Crux
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