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Afirman que las cifras están infladas, que fue construido con metodología contradictoria y que es ideológico.
El presidente del episcopado francés, el día de entrega del Informe Sauvé
Redacción (01/12/2021 07:07, Gaudium Press) Al parecer, un informe no oficial de ocho miembros de la Academia Católica de Francia ha motivado las postergación de la audiencia papal a Jean-Marc Sauvé y su equipo, autores del ‘informe Sauvé’ que dictaminó que los abusos en la Iglesia de Francia habrían superado los 300.000 casos.
Un texto crítico de 15 páginas, elaborado por los académicos, y enviado a la Conferencia Episcopal, al Nuncio y al Papa, ha sido calificado como una demolición aguda y multidisciplinar del Informe Sauvé y sus recomendaciones, que en su momento ocupó los titulares de medios en todo el mundo.
Los autores son: Jean-Robert Armogathe, director de la revista de teología Communio; Philippe Capelle-Dumont, profesor de filosofía en la Facultad de Teología de Estrasburgo; el abogado Jean-Luc Chartier; el historiador Jean-Dominique Durand; la jurista Yvonne Flour; el filósofo Pierre Manent; Hugues Portelli, decano de la Facultad de Ciencias Sociales y Económicas del Instituto Católico de París; y Emmanuel Tawil, profesor de París-II.
Los académicos, a partir del examen de los archivos, establecen que hubo entre 4.832 y 27.808 víctimas, cifra muy alejada de las más de 300.000 alegadas por Sauvé. Para establecer ese estimativo, se basan en resultados obtenidos por investigadores de la Escuela Práctica de Altos Estudios, que fueron encargados por el propio equipo Sauvé.
Hostilidad hacia lo católico
“Las cifras presentadas y lanzadas a los medios de comunicación y al público no resistirían un estudio más exhaustivo”, establecen los académicos, además de afirmar que “El espíritu que prevalece en el análisis de las causas y en la formulación de las recomendaciones”, “parece ‘a-priori’ ideológico… difícil no ver que de la imparcialidad ostentada, el CIASE ha pasado a una hostilidad hacia la Iglesia.”
“Un Informe CIASE que no es ni valiente ni justificable, construido con una metodología superficial y contradictoria, con graves carencias teológicas, filosóficas y jurídicas y con recomendaciones muy cuestionables”, concluyen los académicos.
Con información de Infocatolica
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