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En 1885, la Santísima Virgen se apareció en lo alto de la iglesia del pueblo de Tra Kieu para ayudar a los feligreses a derrotar a los soldados reales que intentaban exterminar a los habitantes cristianos del pueblo.
Redacción (04/06/2025, Gaudium Press) En el último día de mayo y para culminar este mes dedicado a María, más de diez mil fieles de toda la vasta diócesis de Da Nang, en el centro de Vietnam, participaron en la peregrinación jubilar al Santuario de Nuestra Señora de Tra Kieu, en conmemoración del Año Santo 2025.
El lugar mariano, profundamente arraigado en la devoción popular, rememora una aparición ocurrida hace 140 años, cuando la Virgen María se manifestó para consolar y proteger a los fieles en tiempos de dificultad.
La peregrinación, celebrada en la solemnidad de la Visitación, fue considerada “un acontecimiento de amor, fe, compromiso y servicio”, según expresó el arzobispo Joseph Dang Duc, coadjutor de la Arquidiócesis de Hue y administrador apostólico de Da Nang. El prelado presidió la solemne Eucaristía, concelebrada por numerosos sacerdotes, y en la que participaron también religiosos, religiosas y fieles laicos.
La peregrinación tuvo un doble significado: marcó la culminación del “mes de las flores”, dedicado en Vietnam a la devoción mariana, y sirvió de preparación espiritual para la solemnidad de Pentecostés.
Durante todo mayo, la comunidad católica, que representa aproximadamente el 7% de la población vietnamita, expresó su amor y gratitud a María mediante celebraciones, vigilias de oración, misas al aire libre y rosarios comunitarios en santuarios marianos, donde fueron ofrecidas flores como símbolo de gratitud.
María recibió la plenitud del Espíritu Santo
Como afirmó el arzobispo Joseph Dang Duc, “la figura de María, que se pone en camino para llegar a la casa de Isabel, es ‘imagen y modelo de una Iglesia sinodal, una Iglesia que sabe salir de sí misma para encontrar, escuchar y servir al prójimo’”. La peregrinación también celebró a María como “mujer de Pentecostés”, una referencia que remite a su papel en la recepción del Espíritu Santo y su intercesión en las persecuciones de la Iglesia vietnamita.
“María –reflexionó a su vez el vicario general, Padre Bonaventura Mai Thai– está en el Cenáculo como la primera en recibir la plenitud del Espíritu Santo. Vive en una profunda relación con Dios y con el Espíritu Santo, convirtiéndose en un modelo para todos nosotros. María es modelo de disponibilidad y acogida hacia el Espíritu de Dios. Contemplando a María en Pentecostés, tenemos la oportunidad de dejarnos moldear por el Espíritu Santo para transmitir el amor de Dios al mundo”.
La historia de la diócesis de Da Nang tiene raíces profundas en la evangelización vietnamita, iniciada en el siglo XVII por misioneros jesuitas en Hoi An. El santuario mariano de Tra Kieu, en la provincia de Quang Nam, es un conocido destino de peregrinación. En septiembre de 1885, la Santísima Virgen se apareció en lo alto de la iglesia del pueblo católico de Tra Kieu para ayudar a los feligreses a derrotar a los soldados reales que intentaban exterminar a los habitantes cristianos del pueblo.
Actualmente, la diócesis cuenta con 73.000 católicos en una población de 2.7 millones y 51 parroquias, continuando así la tradición de fe y servicio.
Con información de la Agencia Fides.
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