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Se teme por la suerte de alrededor de 300.000 afganos que colaboraron con las tropas americanas durante las dos décadas que ahí hicieron presencia.
Mons. Broglio
Redacción (17/08/2021 15:09, Gaudium Press) La “dignidad humana” de las personas afganas “debe ser respetada” en medio del caos del país, ha dicho hoy el Arzobispo castrense de los EE.UU., Mons. Timothy Broglio.
“La caída de Afganistán y la salida de sus líderes electos son motivo de preocupación, debido a la posible negación de los derechos humanos, particularmente de mujeres y niñas”, expresó el Arzobispo.
Los talibanes conquistaron Kabul el fin de semana pasado, y es cuestión de poco tiempo para que se adueñen por completo de la administración del país.
Mons. Broglio también estuvo en Afganistán:
“Mis dos visitas al país confirmaron mi impresión sobre los sacrificios, incluso hasta la muerte, hechos por muchos miembros de las Fuerzas Armadas y civiles luchando luchan por llevar estabilidad y paz a la gente de allí”, dijo el Arzobispo Broglio.
“Por el momento, sin embargo, solo podemos orar por el pueblo afgano, apoyar cualquier esfuerzo humanitario que se lleve a cabo allí (especialmente a través de Catholic Relief Services) y dar voz al liderazgo local en todos los lados”, dijo.
“Naturalmente, estoy particularmente preocupado por aquellos de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos que continúan defendiendo a los refugiados y bienes en el país”, agregó el arzobispo. “Oramos para que no haya violencia y una partida pacífica para todos aquellos que deseen irse”.
Es de decir que los afganos que ofrecieron servicios de traducción, interpretación, seguridad, transporte y otros servicios a las tropas americanas por espacio de dos décadas temen por su suerte. Se calcula que alrededor de 300.000 civiles afganos colaboraron con las tropas americanas durante las dos décadas que estas han hecho presencia en el país.
Habla también el presidente de asuntos internacionales del episcopado inglés
Sobre la situación de Afganistán también se pronunció Mons. Declan Lang, presidente del departamento de asuntos internacionales de la Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales, quien invitó a poner la esperanza “en el Señor Jesucristo”, “que nunca abandonará al pueblo de Afganistán”.
“Nuestra esperanza se puede depositar hoy en las organizaciones humanitarias que continúan ofreciendo su asistencia y en los esfuerzos para acoger y proteger a los refugiados que huyen de sus hogares”.
Con información de Catholic News Service
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