¡Atención católicos! ¡Estamos en guerra!

Fuentes confiables nos han revelado que el enemigo está como “león rugiente” listo para atacarnos en cualquier momento (1Pe 5, 8).

Foto: ik Shuliahin en Unplash

Redacción (15/03/2022 15:34, Gaudium Press)

Marzo de 2022

¡Atención católicos!

¡Estamos en guerra! ¡Estamos en Cuaresma!

Fuentes confiables nos han revelado que el enemigo está como “león rugiente” listo para atacarnos en cualquier momento (1Pe 5, 8).

Nuestro servicio de inteligencia nos ha informado que debemos estar alerta especialmente durante los cuarenta días que preceden al Miércoles de Ceniza, pues el enemigo infernal está analizando nuestras fronteras para encontrar una brecha por la cual penetrar en nuestras tierras, desanimarnos y dominar nuestra nación.

Nuestro invicto Comandante, Jesucristo Nuestro Señor, ha dado órdenes para que todos los ciudadanos tomen inmediatamente sus armas de defensa: Rosario, Vía Crucis, Novenas, ayunos, y los pequeños sacrificios del día a día; y para una mayor defensa del territorio manda que se aproximen con frecuencia a las parroquias e iglesias para recibir armamentos más efectivos como la Santa Misa, la Sagrada Comunión y la adoración al Santísimo Sacramento.

De igual manera nuestro divino Comandante ha mandado que todos los heridos en guerras pasadas o actuales se aproximen a los sacerdotes para recibir los debidos cuidados para sus enfermedades graves o leves, por medio de la confesión.

Los planes de guerra estarán a alcance de todos los ciudadanos todos los domingos durante el sermón de la Misa, allí se dirán las tácticas a ser usadas, se recomendarán las herramientas necesarias para combatir, se revelará el verdadero estado de la guerra y se publicarán las palabras y disposiciones de nuestro querido Comandante.

¡No tengamos miedo en esta lucha! ¡Somos invencibles, porque nuestro Comandante es invencible! Quien camina a su lado nunca será vencido, pues Él mismo afirmó: “¡Ánimo! ¡No tengáis miedo! ¡Yo he vencido al mundo!” (Jn 16, 33).

Finalmente, la Madre del Comandante, María Santísima, me pide recomendarles que estará esperando al que quiera, a cualquier momento, a cualquier hora, y en cualquier lugar para curar sus heridas, sustentarlos con un consejo, refrescar a los agotados por la lucha, proveerlos de todo lo necesario para el combate, interceder junto al Comandante e inclusive acompañarlos a pelear en el frente de batalla.

Atentamente,

Sector de Prensa del Comando General

(Por Guillermo Torres Bauer)