En el país eslavo hay todo un movimiento para imponer el aborto políticamente.
Redacción (17/06/2024, Gaudium Press) Ayer domingo 16 de junio, las marchas bajo el eslogan “Unidos por la vida, la familia y la patria”, se tomaron las calles de Varsovia, Cracovia y Gdańsk, así como también ciudades más pequeñas de Polonia, como Łęczna, Gryfic y Dzierżoniów.
En la capital de ese país, la marcha comenzó con una misa en la Iglesia de Santa Aleksandra, en la Plaza de las Tres Cruces. Enseguida, los participantes pasaron por el Parlamento y por el Gabinete del Primer Ministro, concluyendo la marcha frente al Monumento al Mariscal Józef Piłsudski, en el Belvedere.
“Vamos a esos edificios del Poder Público a expresar preocupación por las actividades que atacan el orden social y moral, y apelamos a las autoridades para que abandonen ese tipo de acción, que mina los derechos a la vida desde la concepción hasta la muerte natural, y respeten los principios que derivan de la fe cristiana y de la civilización latina”, enfatizó el coordinador de las Marchas por la Vida y la Familia, Paweł Kwaśniak, del Centro por la Vida y la Familia.
Él dejó claro que la objeción no se refiere apenas a los cuatros proyectos pendientes en el Parlamento que extienden la legalidad del aborto hasta la 12ª. semana de vida del feto. El Centro para la Vida y la Familia también se opone a las tentativas de negar el principio de que los padres críen a sus hijos de acuerdo con su conciencia.
Además, las marchas son una excelente oportunidad para integrar a las familias, que se reúnen en picnics multigeneracionales.
“Damos tanto espacio a las familias, especialmente a las familias numerosas, para mostrar a toda la sociedad que esas familias existen, que crían hijos, que el amor conyugal puede ser bonito, basado en la responsabilidad, cuyo fruto son hijos aceptados en el mundo y criados por cónyuges amorosos. Por medio de ese ejemplo”, continúa Paweł Kwaśniak, “las familias pueden incentivas a los jóvenes a formar sus propias familias, cultivando el amor y la responsabilidad”.
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El episcopado acompaña todo
Las Marchas por la Vida y la Familia son realizadas con el patrocinio de la Conferencia Episcopal de Polonia. “Preparamos y enviamos a los fieles una Carta Pastoral en defensa de la vida concebida. Sabemos que la Iglesia defiende la vida desde el inicio, ella es un gran don de Dios y está protegida por varias instituciones, así como también por la Constitución de la República de Polonia, por la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea, por la Declaración de los Derechos Humanos”, explica el Arzobispo Tadeusz Wojda, Presidente de la Conferencia Episcopal de Polonia, que invita a los fieles a participar de las marchas.
Con información de Vatican News.
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