Cardenal Goh dice que la parte más importante de la elección de León XIV fue la previa al cónclave

La Iglesia no es un clubhouse, dijo el Cardenal asiático.

Redacción (09/06/2025, Gaudium Press) Interesante entrevista ha concedido el Cardenal William Goh a The Strait Times, el pasado 4 de julio, sobre su experiencia en el cónclave que eligió a León XIV.

Lo primero fue reconocer que el nombre del Cardenal Prevost no era de los primeros que ‘sonaban’: “Él no era uno de los más conocidos candidatos para el papado… y las mayoría de nosotros no los conocía excepto tal vez los de América Latina o Roma”, declara el purpurado.

La participación del Cardenal Goh, de 67 años, en el cónclave, también es histórica, pues es el primer natural de Singapur que participa en esa elección, la más importante de la tierra, y ciertamente la más seguida por la gente en todo el globo. Por lo tanto, muchas cosas para él de ese encuentro, fueron también novedosas.

Considera el purpurado que si bien el cónclave fue rápido, de solo cuatro votaciones, la preparación, particularmente la de las Congregaciones Generales, fue bastante concienzuda.

“Veníamos de todo el mundo; tenemos diferentes puntos de vista sobre lo que creemos que el nuevo Papa debe y puede hacer, porque provenimos de circunstancias diversas”, dijo el cardenal Goh, añadiendo que consideraba que este período previo era la parte más importante del proceso electoral.

“Pero todos coincidimos en que el Papa debe ser alguien capaz de promover la unidad dentro de la Iglesia y la paz entre las naciones”, afirma el Cardenal Goh, en una aseveración que ha sido casi unánime entre los purpurados.

Caontriubyó también para el conocimiento de los candidatos, las interacciones informales habidos en los descansos y en las comidas.

Destaca el Cardenal la participaciónde 23 cardenales de Asia, la mayor en la historia de los cónclaves.

“En el pasado, la mayoría de los cardenales provenían de Europa. Pero la Iglesia se ha vuelto demasiado eurocéntrica, lo cual no es la Iglesia universal hoy en día”, dijo el cardenal Goh, añadiendo que el cristianismo ha estado creciendo en Asia y África.

La religión ha estado en declive en muchas partes de Europa, pero ha habido un resurgimiento de la fe, especialmente entre los jóvenes de la región, afirmó.

Insistió en el deseo de los cardenales de unidad, que no es uniformidad: “Pero, por supuesto, la unidad no significa uniformidad”, dijo. “Es en la diversidad donde realmente vemos la riqueza de la Iglesia… las diferentes culturas, liturgias, ritos y formas de vivir la misión pastoral en países ricos, en países pobres, en países oprimidos y discriminados”.

Unidad también es claridad, en la mente del purpurado: “La Iglesia no es un club donde puedes elegir nadar, cantar o jugar en el casino. La Iglesia es donde todos somos miembros de este cuerpo de Cristo y creemos en el Evangelio. Queremos vivir esa enseñanza”, dijo.

“La inclusión significa que todos son bienvenidos… Siempre y cuando sepan que no están aquí para cambiar el Evangelio según sus preferencias, sino para adaptar su vida al Evangelio. Eso, para mí, es la inclusión”.