El prefecto del Dicasterio para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos dijo que Isabel se dedicó “incansablemente a servir a su pueblo, pero también lo confió a la protección de Dios” .
Redacción (08/09/2022 13:06, Gaudium Press) Tras conocerse el deceso de la Reina Isabel II a los 96 años, en el Castillo del Balmoral, el recientemente creado Cardenal Arthur Roche, prefecto del Dicasterio para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos y quien es inglés, hizo el elogio de la difunta reina.
Dijo el purpurado que Isabel se dedicó “incansablemente a servir a su pueblo, pero también lo confió a la protección de Dios”, y que dio testimonio de valores cristianos como el bien común, la vida familiar y la paz.
Pidió el Cardenal Roche a Dios que le dé descanso en paz a esa “gran alma”.
“Su amabilidad y toque común, su habilidad política y amor por su gente en los muchos países, culturas y religiones de la Commonwealth [Comunidad británica de naciones] han sido testigos de un vínculo único e ininterrumpido de dedicación al servicio de los demás. Ha sido muy querida por todos”, expresó también el purpurado en su declaración.
Con información de Vatican News
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