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El primer ministro iraquí reconoció una vez más al patriarca caldeo como responsable de las propiedades y dotaciones de su Iglesia patriarcal “en Iraq y en el mundo”.
Foto: Patriarcado caldeo
Redacción (20/06/2024, Gaudium Press) En medio de tantas crisis, o de las que amenazan volverse crisis, siempre es bueno constatar que algo que era un problema termina bien.
Noticiaba la Agencia Sir en días pasados el nuevo decreto firmado por el primer ministro iraquí, Muhammad Shuiaaa al-Sudani, reconociendo una vez más al patriarca caldeo, Cardenal Louis Raphael Sako, como responsable de las propiedades y dotaciones de su Iglesia patriarcal “en Iraq y en el mundo”.
Por su parte el Cardenal agradeció a la “autoridad religiosa cristiana e islámica, chiita y sunita, y todas las organizaciones gubernamentales, en particular al Departamento de Estado de los Estados Unidos, al Departamento de Asuntos iraquíes y las Libertades Religiosas y Civiles, los medios de comunicación y todas las personas que lo apoyaron” en la crisis sobrevenida tras el retiro del decreto n. 147 en julio del año pasado, por parte de presidente iraquí Abdul Latif Rashid.
En julio de 2013 el mandatario Jalal Talabani emitía un decreto reconociendo al Patriarca como jefe de la Iglesia caldea “en Iraq y en el mundo”, además de “responsable y custodio de las propiedades de la Iglesia”. Ese decreto había sido revocado por Abdul Latif, en un movimiento del que el Cardenal culpaba a Ryan al-Kildani, jefe de las Brigadas Babilonia, milicia filo-iraníes, buscando menoscabar su autoridad y hacerse con las propiedades de la Iglesia.
Como signo de protesta por esas movidas, el purpurado Sako había abandonado su residencia en Bagdad y se había trasladado a Erbil, para solo regresar el pasado 11 de junio, cuando se reunió con sacerdotes de la Arquidiócesis. Otro momento de reanudación de lazos se dará en el próximo sínodo de la Iglesia Caldea, que se desarrollará del 15 al 19 de julio en Bagdad.
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