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Hace dos días el Cardenal Sarah anunciaba en su cuenta twitter que el Papa había aceptado su renuncia como Prefecto de la Congregación del Culto Divino.
Redacción (22/02/2021 10:13, Gaudium Press) Hace dos días, el pasado sábado 20 de febrero, el Cardenal Robert Sarah anunciaba que el Papa Francisco había aceptado su renuncia al cargo de Prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, después de haber cumplido 75 años (lo que ocurrió en junio pasado), y que se colocaba en las manos de Dios, confiante en la única roca, Jesucristo.
Fue escogido por Francisco como prefecto de ese dicasterio en noviembre del 2014, y es reconocido por todos como una de las más altas figuras de la Iglesia.
El Cardenal Sarah es oriundo del pueblo de Ourous, en la Guinea Francesa africana.
Tras haber sido ordenado Arzobispo de Conakri con sólo 34 años de edad, Juan Pablo II lo hace Secretario de la Congregación para la Evangelización de los pueblos en el 2001.
Ya siendo Papa Benedicto XVI éste lo hace presidente de Pontificio Consejo “Cor Unum” y luego lo crea Cardenal, en el 2010.
Ha sido considerado un purpurado “conservador”, mote que simplemente revela su adhesión a la doctrina católica de siempre.
A inicios del año 2020 publicó junto con Benedicto XVI una obra sobre el sacerdocio y el celibato sacerdotal titulada “De profondeurs de nos coeurs”, Desde lo más profundo de nuestros corazones.
En la obra se resalta el valor del celibato de los presbíteros, fundado en la Escritura y una alta reflexión teológica.
Pero evidentemente no fue la única obra del Cardenal Sarah, sino que entre sus muchas se destacan “Se hace tarde y anochece”, “La fuerza del silencio”, “Dios o nada”, de publicación reciente, de alto impacto en el mundo católico y fuera de él.
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