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Llueven críticas sobre los planes para reemplazar la atmósfera gótica de la catedral de Notre Dame con arte contemporáneo.
Redacción (01/12/2021 15:46, Gaudium Press) La catedral de Notre Dame de París, devastada por las llamas de un incendio el 15 de abril de 2019, está siendo restaurada. A pesar de 2 años de trabajo en la reconstrucción del exterior de uno de los monumentos más históricos de París, su interior aún no ha sido renovado.
Sin embargo, el 9 de diciembre se presentará un proyecto de remodelación para el interior de Notre-Dame a la Comisión Nacional de Arquitectura y Patrimonio (CNPA).
Este controvertido proyecto asombra a mucha gente. Según informa el periódico británico Daily Telegraph, los críticos temen que estos cambios transformen la catedral en un “Disneyland políticamente correcto”.
Los cambios en el nuevo proyecto
El padre Drouin, director del Instituto Superior de Liturgia, reveló el esquema del proyecto para restaurar la Catedral de Notre-Dame de París. El objetivo, declara, es mantener Notre-Dame como un “lugar de culto”, “dar una mejor bienvenida” e informar al público que “no siempre tiene una cultura cristiana”.
Los fieles y visitantes de todo el mundo deben entrar por la gran puerta central y no más por las puertas laterales.
El altar permanecerá en su lugar, pero otros elementos como el tabernáculo y el baptisterio se trasladarían a otro lugar, mientras que la mayoría de los confesionarios pasarían al primer piso, dejando solo cuatro en el área principal de la catedral.
En lugar de iluminación de techo, habrá “luces más suaves a nivel de la cara” para dar una sensación más íntima a las misas y conciertos anuales. Las tradicionales sillas de paja serían reemplazadas por bancos más cómodos con sus propias lámparas para iluminar la oscuridad.
En cuanto a las capillas laterales del edificio, serían completamente renovadas a favor de la valorización de las obras de arte: “pinturas antiguas de los siglos XVI y XVIII que interactuarán con objetos de arte contemporáneo”.
Finalmente, según el padre Drouin, para una mejor comprensión de la historia del cristianismo, se quiere proyectar en las paredes “frases bíblicas o tradición espiritual cristiana en varios idiomas, cuya elección aún no está decidida”.
Maurice Culot, un arquitecto que vio los planos, dijo al periódico británico: “Es como si Disney estuviera entrando en Notre-Dame. Es una especie de parque de atracciones y, dado el tamaño del lugar, muy infantil y trivial”.
¿Por qué desfigurar una catedral antigua para mostrar supuestamente un proceso de modernización? ¿No sería más sensato preservar la tradición ya que los edificios modernos pululan en el mundo actual?
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