Costa de Marfil: la Iglesia da la bienvenida a nuevos sacerdotes y diáconos

El 11 de julio de 2024, 11 sacerdotes fueron ordenados en la catedral de San Pablo de Abiyán; y el 13 de julio, en la catedral de Saint-André de Yopougon, fueron ordenados otros 17 sacerdotes y 4 diáconos.

Foto: Vatican News

Redacción (18/07/2024, Gaudium Press) En la catedral de San Pablo de Abiyán, Costa de Marfil, el cardenal Jean-Pierre Kutwa, administrador apostólico de Abiyán, expresó su inmensa alegría al ordenar 11 sacerdotes el 11 de julio de 2024, y también dio gracias a Dios por sus 53 años de ordenación sacerdotal. Ya en la catedral de San Andrés de Yopougon, Mons. Jean-Salomon Lezoutié, obispo de Yopougon, invitó a los 17 sacerdotes y a los 4 diáconos que ordenó unirse en oración.

Sacerdocio: una misión llena de responsabilidad

“El Señor está reclutando segadores, y es un honor ser llamado por el Señor, y Él os asocia con su sacerdocio único”, dijo el cardenal Jean-Pierre Kutwa.

Una misión llena de responsabilidad que debe ser ejercida con humildad y desapego, como destaca Mons. Jean-Salomon Lezoutié: “Un día tendremos que dar cuentas de las almas que se nos han confiado. Ante una responsabilidad tan enorme, es natural sentir miedo. Sin embargo, la solución está en la oración. Por eso, si rezan unos misterios del rosario, ya es bueno. Si rezan el rosario completo, mejor aún. Tienen a Jesús en ustedes y con ustedes en el Santísimo Sacramento, también tienen a la Virgen María, pidan su intercesión para ahuyentar el miedo”, recomendó.

Sacerdotes al servicio de los hermanos

“Es importante recordar que el sacerdocio es esencialmente una ofrenda de uno mismo a Dios, en una donación continua a los hermanos y a las hermanas”, destacó el prelado, felicitándolos y animándolos por su compromiso de seguir a Cristo en el buen servicio de los hermanos. El cardenal Kutwa les instó a no olvidar nunca que el ministerio sacerdotal no nace primero con la institución de la Eucaristía, sino mediante la institución del servicio. “Por tanto, no se trata de aumentar las filas del presbiterio en cantidad, sino en calidad”, advirtió.

El administrador apostólico de Abiyán pidió a los fieles presentes que sostengan con la oración a los nuevos ordenados. Destacó la importancia de vigilar el ministerio y la vida de los sacerdotes para que vivan no sólo un sacerdocio feliz y pleno, sino también, y sobre todo, un sacerdocio santo”.

Con información de Vatican News