Menú 
La declaración emitida por el ministerio de Exteriores de Nicaragua, se da después de declaraciones del Obispo de Matagalpa por EWTN.
Redacción (10/02/2025 15:21, Gaudium Press) El gobierno de Daniel Ortega, por boca de su ministerio de exteriores, la ha emprendido directamente contra el Vaticano, después de una entrevista concedida a EWTN por el exiliado Obispo de Matagalpa, Mons. Rolando Álvarez el pasado 6 de febrero:
“Nos pronunciamos sobre Declaraciones que a nombre del Estado Vaticano, se realizan desde Páginas y Plataformas que les son propias, Declaraciones que constituyen un agravio y un insulto a la Soberanía y Dignidad del Estado nicaragüense”, espeta Exteriores de Nicaragua en una carta publicada en español e inglés el sábado 8 de febrero.
“Las Declaraciones citadas, son irresponsables e irrespetuosas —continúa la nota nicaraguense— y violentan las máximas Leyes y Normas que rigen la Vida Independiente de nuestra Nicaragua Bendita. Además, sin ninguna autoridad política supranacional, el Estado Vaticano pretende disponer sobre Cargos y Poderes que otorgan, en Nicaragua, a Personas que dejaron de ser nicaragüenses, por conductas impropias e intolerables de promoción de crímenes, políticamente instigados, así como constantes llamados a romper la Paz, con todo tipo de violencia, falsedades y planificadas calumnias, infringiendo angustias, sufrimiento y dolor, a las Familias de nuestro País”, agrega.
En la entrevista con EWTN, Mons. Álvarez cuenta que cuando llega a Roma exiliado, en enero del año pasado, él deseó presentar su renuncia al Papa, pero que Francisco quiso que permaneciera como titular de la sede de Matagalpa, “aún estando en la diáspora”. Se entiende ahí la alusión de la dictadura Ortega, a que el vaticano no tiene “autoridad política supranacional” y demás sandeces. “Amo mucho a mi gente, amo a mi pueblo y decirles que soy un obispo para la Iglesia Universal. Es decir, fui ordenado obispo para Matagalpa. Soy cabeza visible de Matagalpa y administrador apostólico de Estelí y lo seguiré siendo hasta que Dios quiera”, dijo el prelado a EWTN.
Pero la nota del ministerio de Exteriores de Ortega, va más allá del tema Mons. Álvarez y quiere erigir al gobierno nicaragüense como veedor de lo que es el verdadero cristianismo, además de hacerle un juicio de responsabilidades sumario a la Santa Sede:
“Toda conducta jurídicamente inadmisible, y por lo tanto ilícita e ilegal, se considera ofensiva a la Dignidad, Decoro y Libertades de nuestro Pueblo, que vive, no sólo según las Leyes Humanas, sino y sobre todo según los Principios, Valores y Prácticas del Cristianismo Verdadero, Esperanza Cierta de millones, desde el Amor a y de Dios, sobre todas las cosas. (…) Desde la Fé (sic) que nos caracteriza y mueve, nuestra más enérgica protesta por la promoción de Personas apátridas, destructivas, ambiciosas e irredentas, y la pretendida imposición de tales Personajes deleznables, como Autoridades que nadie reconoce o reconocerá”, dice la nota.
“La Historia de inclinaciones y prácticas abominables, perversas, inhumanas en sintonía con infames Monarquías Colonialistas, incriminan a ese Estado Vaticano, que, usurpando el Nombre de Dios cortó cabezas, enterró espadas, y exterminó Pueblos y Culturas enteras, declarando muerte a las lenguas y prácticas espirituales propias de Pueblos Originarios, y blandiendo armas de todo tipo, para dominar, conquistar y robar nuestros ricos Patrimonios Materiales y Culturales, que, además, han sostenido materialmente al llamado Tesoro del Imperio Vaticano, nada generoso y sí culpable de crímenes de lesa humanidad”, continúa, en un lenguaje ya característico de dictadores y dictaduras tropicales.
Deje su Comentario