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Los sacerdotes Ivan Levytskyi y Bohdan Helet, miembros de la Orden Redentorista, fueron capturados en 2022, en Berdyansk, actualmente bajo ocupación rusa.
Foto: synod.ugcc.ua
Redacción (01/07/2024, Gaudium Press) Dos sacerdotes de la Iglesia greco-católica de Ucrania, que estaban en cautiverio ruso desde el 16 de noviembre de 2022, finalmente regresaron a su país después de ser liberados en una negociación de cambio de dinero. en el que también participaron otros ocho civiles. Los sacerdotes Ivan Levytskyi y Bohdan Helet, miembros de la Orden Redentorista, fueron capturados en Berdyansk, actualmente bajo ocupación rusa, y recién en mayo de este año se supo que estaban vivos.
Los liberados por los rusos llegaron a Kiev, el pasado viernes 28, donde ya los esperaba el nuncio apostólico en Ucrania. En entrevista con Radio Vaticano, el nuncio recalcó que los Redentoristas, aunque físicamente agotados, seguían siendo, sobre todo, sacerdotes. Mons. Visvaldas Kulbokas destacó que, a pesar de las dificultades, los sacerdotes no se olvidaron de quienes permanecen en cautiverio, pidiendo oraciones y esfuerzos para ayudar a cada uno a regresar a casa. Destacó la importancia de seguir ofreciendo oraciones por todos los prisioneros, dado el sufrimiento extremo que enfrentan muchos de ellos después de años en cautiverio.
La Iglesia greco-católica ucraniana informó que cuando estalló la guerra, los sacerdotes decidieron permanecer con sus fieles, sirviendo a comunidades de ambos ritos y ofreciendo esperanza bajo la ocupación rusa. Tras su detención, fueron acusados de posesión ilegal de armas, ya que en la iglesia se colocó material militar con la intención de incriminarlos. Hay informes de que fueron sometidos a terribles torturas en un intento de obligarlos a confesar crímenes que no cometieron.
El jefe de la Iglesia greco-católica ucraniana, Mons. Sviatloslav Shevchuk, había pedido en repetidas ocasiones su liberación. Y hoy expresó, en una nota, “agradecimiento al Santo Padre Francisco, que contribuyó personalmente a la liberación de nuestros sacerdotes redentoristas Bohdan e Ivan. […] A pesar de los grandes obstáculos, ya que su encarcelamiento duró más de un año y medio, los esfuerzos de la diplomacia vaticana lograron un resultado victorioso”.
Al final del rezo del Ángelus, con motivo de la fiesta de los santos Pedro y San Pablo, patrones de Roma, el Papa Francisco agradeció a Dios por la liberación de los dos sacerdotes greco-católicos e hizo un llamamiento para que “todos los prisioneros de esta guerra puedan volver pronto a casa. Oremos juntos: que todos los presos regresen a casa”.
Con información de Vatican News.
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