Hoy firmó otra Orden Ejecutiva para favorecerlo. Senadores demócratas ahora contra centros de apoyo al embarazo
Redacción (03/08/2022 21:14, Gaudium Press) Sí, ya lo sabemos: al señor presidente Biden le importa más ser reconocido como adalid de la matanza de los inocentes llamada aborto que su supuesta fe católica.
Hoy el noticiario internacional difundió la nueva de que Biden ha firmado otra orden ejecutiva (acción administrativa de acuerdo a las posibilidades que le da la ley) que “protege” el acceso al aborto, incluyendo el acceso a medicamentos abortivos y a medicamentos anticonceptivos que tienen poder abortivo.
Esta Orden también busca facilitar el traslado de un estado a otro a las mujeres que quieran practicarse un aborto, pues tras la reciente caída de la sentencia abortista Roe vs. Wade, a la par de varios estados que están actuando pro-abortivamente (hace pocas horas, p. ej. un referendo en Kansas votó en favor del aborto), hay varios otros estados que lo están restringiendo, algunos incluso hasta la práctica prohibición total. Por ejemplo, ayer en Kentucky una Corte de Apelaciones concedió al fiscal general del estado una solicitud de emergencia para reinstaurar dos leyes que prácticamente prohíben el aborto, mientras se resuelve otra disputa judicial de fondo.
Pero Biden sigue firme en su oscura ‘cruzada’ pro-aborto, ante – como lo reconoce la propia orden ejecutiva de hoy de Biden – “el continuo avance de las leyes restrictivas del aborto en estados a lo largo del país”.
Senadores demócratas, en la estela Biden
Mientras tanto, la radicalidad pro-abortista de Biden busca ser emulada y hasta sobrepasada por senadores de su partido.
Por ejemplo, noticia Aciprensa que la senadora Elizabeth Warren acusó recientemente ante los medios a Centros de Recursos de Embarazos, que apoyan educativa y financieramente a mujeres que deciden seguir adelante con la gestación, de “engañar a las personas que buscan ayuda para interrumpir el embarazo”. Ella, senadora por Massachusets, quiere algo drástico: “Necesitamos cerrarlos [esos centros] aquí en Massachusetts, y necesitamos cerrarlos en todo el país”.
La senadora Warren no se queda solo en palabras, sino que ahora se ha unido al senador Bob Menendez, descendiente de cubanos quien también se dice católico, en la realización de un proyecto de ley que busca sancionar centros que ayudan a mujeres embarazadas. Si se llegase a aprobar este proyecto, y en palabras del propio ‘católico’ Menendez, se podrían tomar “medidas enérgicas contra estos centros por sus tácticas engañosas y los responsabilice por sus acciones”.
¿Emularán los pastores de estos políticos católicos, lo hecho por el Arzobispo Cordileone con la católica y abortista Nancy Pelosi de restringir su acceso a la comunión? Claridad también es caridad, por la salvación de sus propias almas y las de los inocentes abortados.
Deje su Comentario