Ayer se liberó el uso ‘recreativo’ de la marihuana en Alemania. El Arzobispo de Denver había publicado Carta Pastoral sobre el tema.
Redacción (02/04/2024, Gaudium Press) En Alemania el cannabis fue legalizado en su uso ‘recreativo’ ayer 1 de abril. Personas mayores de 18 años pueden tener hasta 25 gramos con destinación a este uso. Como es ya sabido, los defensores de esta legalización argumentan que quieren desmantelar el mercado ilegal.
Ante el hecho algunos han sacado a luz la reciente Carta Pastoral de Mons. Samuel Aquila, Arzobispo de Denver en los EE.UU., con ocasión de la legalización de la marihuana en Colorado hace 10 años.
Titulada “Para que puedan tener vida”, la Carta presenta las enseñanzas de la Iglesia sobre las drogas recreativas con un enfoque particular en la marihuana, con el objetivo de “ayudar a los católicos a dialogar inteligentemente con el 70% de los estadounidenses que actualmente creen que la marihuana debería ser legal”.
“Lo más importante que podemos hacer como cristianos en respuesta a la cultura de las drogas es proclamar el Evangelio. Es a través del amor, la misericordia, el significado y la esperanza que se encuentran en Cristo, que las personas serán disuadidas del consumo de drogas o inspiradas a liberarse de su influencia”, escribió el Arzobispo.
Respecto a la creencia de que el cannabis no es dañino, el Arzobispo comentó en noviembre que Colorado “fue testigo de un considerable aumento en la adicción, y el trastorno por consumo de marihuana se duplicó con creces en un lapso de menos de 20 años. Esto no es sorprendente, ya que el consumo de cannabis entre los habitantes de Colorado ha aumentado dramáticamente desde la legalización”.
Monseñor Aquila advirtió: “Más gente que consume marihuana significa inevitablemente más adicción”.
Catecismo
La Iglesia Católica ha mantenido una posición clara y constante sobre el uso de drogas recreativas. El Catecismo de la Iglesia Católica afirma: “El uso de la droga inflige muy graves daños a la salud y a la vida humana. Fuera de los casos en que se recurre a ello por prescripciones estrictamente terapéuticas, es una falta grave.” (núm. 2291).
El Catecismo afirma también la virtud cristiana de la templanza, que “conduce a evitar toda clase de excesos, el abuso de la comida, del alcohol, del tabaco y de las medicinas” (n. 2290).
Con información de CNA
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