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A los cuatro años hacía la misa con sus peluches.
Redacción (03/08/2023 11:11, Gaudium Press) Aciprensa trae la historia de Emilio, seminarista menor de 16 años, pero que desde los 4 jugaba a celebrar misa con sus juguetes.
Ahora, con 16 años, y 3 en el seminario de Badajoz, España, dice que ha encontrado la felicidad.
“Desde muy pequeño, en esta parroquia [en Badajoz], ya con 4 años empecé a ayudar en Misa. Yo quería ser como el sacerdote y en mi casa jugaba a celebrar Misa con mis peluches”, relata Emilio Madrid Mérida, en conversación con Aciprensa mientras pasa sus vacaciones en Algeciras con su familia.
El vivía en el seno de una familia católica practicante, pero cuando le comunicó a la madre que quería irse al seminario menor, ella se sorprendió, y después “lloraba” mientras le ayudaba a hacer la maleta.
Los amigos también se pusieron “muy tristes, pero cada 15 días salgo del seminario y los puedo ver. En general se lo tomaron muy bien y estaban muy contentos”, afirma.
Aunque reconoce su juventud —de hecho todavía le falta más de un año para terminar la Educación Media— y que sigue “viviendo en este mundo”, dice también que tiene “el corazón en otro sitio” y lo ve “con ojos diferentes, no tan mundanos, sino que las cosas de este mundo las aplico a Dios”.
“Dios quiere que seamos felices”, pero “hay que saber dónde encontrar la felicidad”, apunta.
Él no tiene ninguna duda de que cursará la Teología y será sacerdote, pues “todos estamos llamados a algo” y él al presbiterado. Que Dios cuide esa vocación.
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