Primero hubo procesión hacia el Estadio. Luego palabras del Obispo; las luces se callan y se encienden las velas.
Redacción (17/10/2022 16:14, Gaudium Press) No, México no es solo el país de los problemas que muchos medios se regodean en mostrar hacia el exterior. Sobre todo, es una nación de mucha fe, teñida del color de la Virgen de Guadalupe.
Es lo que muestra, p. ej., el rezo del Rosario Viviente, bello evento mariano tradición de Ciudad Juárez, en la frontera con EE.UU., que en su última edición se realizó el 15 de octubre pasado y que incluyó a alrededor de 16,000 personas.
Todo inició con una peregrinación desde el parque Burunda que fue hasta el estadio local, donde estaba ya reunida la muchedumbre. Entonces el Obispo, Mons. José Guadalupe Torres dio inicio al rezo del rosario: “Venimos a orar a los pies de nuestra Madre Santísima en esta tarde en que abrimos nuestro corazón para recibir el regalo de la paz; y al mismo tiempo un compromiso, una tarea, una misión, todos juntos como pueblo de Dios, de ser artesanos de la paz”, dijo el prelado.
Un momento destacado fue la procesión alrededor de la cancha, de una imagen de Nuestra Señora portada por 14 Caballeros de Colón.
Ya caía la noche, y entonces las luces del estado se apagaron, dando lugar a la iluminación de velas y de luces de celulares, lo que confirió un ambiente recogido y sacral al acto. Después de pasadas las cuentas, se siguió un concierto.
El Rosario Viviente
El Rosario Viviente de Ciudad Juárez inició hace 30 años, según escribe el P. Eduardo Hayen, director del semanario de la diócesis.
“Fue un hecho que impulsó la devoción a la Virgen María en nuestra comunidad fronteriza. Se trata del acontecimiento de fe y oración que reúne a más católicos en un solo lugar”, afirma.
El presbítero indicó que la noche del Rosario Viviente “es única en el año” y la calificó como “una proclamación sostenida del misterio de nuestra salvación”.
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