Tras la reapertura de templos, 40% de los católicos de misa dominical no regresaron.
París (21/09/2020 07:29, Gaudium Press) En Francia, por la pandemia, la iglesia dejó de colectar 60 millones de euros, lo que para las finanzas del arca de Pedro representa algo más o menos parecido a una catástrofe.
Pero la situación en aún más preocupante, si se puede, porque las estadísticas dicen que ahora con la liberalización del culto presencial, hay muchos practicantes que no volvieron a misa.
Según afirma Vincent Neymon, uno de los portavoces de la Conferencia de Obispos de Francia, 40 por ciento de quienes frecuentaban las iglesias los fines de semana no lo están haciendo ahora.
“Una mayoría de entre ellos, con edades de más de 65 años, tienen sin duda temor por el Covid 19”, expresa el portavoz.
Otros, “un sector minoritario”, se contentaría con las celebraciones online, y con las retransmisiones de los oficios, a los cuales se habituaron durante el confinamiento.
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Ya al inicio de junio, Gaudium Press noticiaba que la Iglesia había dejado de recoger entre 40 y 50 millones de euros por causa de la pandemia en la hija primogénita de la cristiandad.
La pérdida de ingresos era debida a que durante 10 domingos seguidos las puertas de las iglesias no se abrieron para las misas dominicales, pero tampoco se habían recogido estipendios por bautismos, matrimonios o funerales. A esto se le sumó que durante la Semana Santa las iglesias no realizaron las ceremonias a las que acude buen número de personas, y en las que manifiestan también su generosidad.
¿Cómo hacer para que regresen los que no han vuelto?
¿El 40% de fieles que no han regresado a misa dominical lo harán? Es una pregunta cuya respuesta inquieta a muchos, y es cuestión vital, entre otras razones porque ese dato hace más preocupante la recuperación económica de la Iglesia.
Durante la crisis se diseñaron diversas herramientas vía internet para recolección de donativos, que sin embargo no compensan en absoluto las pérdidas.
Algunos obispos han manifestado su deseo de lanzar campañas de recolección de diezmos, y esperan que ahí se manifieste un surto de generosidad de los fieles.
Lo cierto es que el balance al final del año será un momento difícil para las diversas jurisdicciones.
Con información de Ouest France
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