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Julien Sanchez, el alcalde, responde la decisión diciendo que han presentado una denuncia por discriminación contra el Estado, y que ahora piden donaciones por el pesebre del 2021.
Foto: Archivo
París (20/01/2021 11:22, Gaudium Press) La justicia ha ordenado a la alcaldía de Beaucaire, en Francia, de retirar el pesebre que colocó en su sede en un plazo de dos días, sujeto a una multa de 5.000 euros diarios. A esa decisión ya respondió el alcalde Julien Sanchez.
“Hemos presentado una denuncia por discriminación contra el Estado [ndr. ante el Consejo de Estado] y estamos pidiendo donaciones, no para el pago de la multa, lo que sería ilegal, sino para el pesebre de diciembre de 2021, que será aún más belo y radiante”, declaró Sanchez. “Mantendremos el pesebre hasta la fecha programada”, añadió, fecha que sería entre el 31 de enero y el 2 de febrero.
“El Estado haría mejor en ocuparse de la crisis sanitaria. Por el momento se muestra más fuerte en ensañarse con figuras de belenes en Provenza que en entregarnos test, mascarillas, jeringas y vacunas… ¡Patético!”, expresó también el alcalde.
Manifestación cultural
La municipalidad afirma que el pesebre presenta “un carácter cultural”.
El pasado 18 de diciembre el tribunal administrativo de Nîmes había ordenado “la suspensión de la ejecución de la decisión no formalizada del alcalde de la comuna de Beaucaire de instalar una pesebre de la natividad en el recito del ayuntamiento por el periodo del 3 de diciembre hasta el 2 de febrero de 2021”.
La municipalidad apeló esa decisión, afirmando que “el pesebre en causa, sí instalado en el ayuntamiento, presenta un carácter cultural, artístico o festivo”.
En el auto reciente, del 18 de enero, el juez sumario de la Corte Administrativa de Apelación de Marsella rechazó la apelación del municipio, ordenando el retiro del pesebre en dos días bajo pena de 5000 euros por día de retraso.
Ahora el municipio acude a instancias más altas.
Según el alcalde ellos tenían dos opciones: «Hay dos reacciones posibles; la primera era desmontar el pesebre a hurtadillas, y sentarnos sobre nuestras tradiciones. Después de todo, los franceses eligieron a Emmanuel Macron, las tradiciones no les interesan. La segunda posibilidad era mantener el pesebre hasta la fecha inicialmente prevista de su desmontaje. Vamos a ir ante el Consejo de Estado para hacer anular esa ordenanza de la Corte Administrativa de Apelación de Marsella y vamos también a perseguir en justicia al Estado francés por discriminación política».
El alcalde siguió la segunda opción. La polémica pinta interesante.
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