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Los datos salen de encuesta de abril del Centro de Investigaciones Sociológicas.
Redacción (26/04/2022 11:29, Gaudium Press) El hombre es espíritu, pero unido a un cuerpo, a ojos, oídos, nariz y boca. Y por ello se podría ampliar el dictado paulino de que la fe entra por los oídos (fides ex auditur) diciendo que la fe entra también por los ojos que miran procesiones, por el olfato que se deleita con el incienso, por el tacto que empuña un rosario.
Sorprende a muchos en todo caso la estadística que aporta la encuesta de abril del Centro de Investigaciones Sociológicas de España (CIS), que dice que el 20 por ciento de los españoles va regularmente a las procesiones religiosas.
Es cierto que de este 20 por ciento solo el 30 lo hace porque lo mueve la fe, y el resto por tradición o el valor artístico. Pero lo cierto es que va mucha más gente a las procesiones de semana santa que a los oficios, por lo que no se puede despreciar que unas pueden ser gancho de los otros.
Esto también se comprueba, si se analiza el rango etario de quienes asisten a las procesiones: Entre los mayores de 65 años, casi el 45 por ciento asiste a las procesiones porque lo mueve la fe, mientras que en la franja de 18 a 24 años, solo el 15 por ciento va a las procesiones movido por la fe: es decir, a los jóvenes los atrae la piedad popular que así se manifiesta, la belleza del espectáculo sacro, aunque no profesen el credo católico. Hay pues que privilegiar la manifestación piadosa, acentuando su belleza, para que sirva de puerta a los principios.
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