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El Papa meditó en el Ángelus de ayer, el último del tiempo ordinario.
Redacción (22/11/2021 09:43, Gaudium Press) Ayer, en el Ángelus dominical en la Plaza de San Pedro, cuando la Iglesia universal conmemoraba la solemnidad de Jesucristo Rey del Universo, el Papa Francisco invitó a buscar la verdad de Jesús, que nos enseña a gobernar los vicios.
Ayer era el último domingo del tiempo ordinario, y desde el próximo domingo iniciamos Adviento, tiempo preparatorio del nacimiento del Salvador.
El Papa recordó que el evangelio de ayer ratificaba la realeza de Jesús, que le respondió a Pilatos: “Sí, como dices, soy Rey” (Jn 18,37), pero la realeza de Jesús “es muy diferente de la mundana”. Jesús es “soberanamente libre del deseo de la fama y de la gloria terrena”.
Es también, la de Jesús, una realeza que libera al hombre del vicio y del pecado.
Jesús hace “libre y soberano el corazón de quien le sigue”.
¿De dónde nace la libertad de Jesús?, se preguntó Francisco. De la verdad, según la respuesta que Él mismo dio a Poncio Pilatos:
“‘Sí, como dices, soy Rey. Yo para esto he nacido y para esto he venido al mundo: para dar testimonio de la verdad’”, recordó el Papa.
“La libertad de Jesús viene de la verdad” señaló Francisco. “Es su verdad la que nos hace libres”, pero “la verdad de Jesús no es una idea, algo abstracto” sino que “es una realidad, es Él mismo que hace la verdad dentro de nosotros, nos libera de las ficciones y de las falsedades que tenemos dentro”.
“Estando con Jesús, nos volvemos verdaderos. La vida del cristiano no es una actuación donde se puede llevar la máscara que más conviene. Porque cuando Jesús reina en el corazón, lo libera de la hipocresía, de las escapatorias, de las dobleces. La mejor prueba de que Cristo es nuestro rey es el desapego de lo que contamina la vida, haciéndola ambigua, opaca, triste”.
Con información de Vatican News
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