Las cuatro campanas de la iglesia sonaron por última vez el lunes 31 de julio de 2023. La edificación va a ser demolida, debido a su frágil estado.
Redacción (02/08/2023, Gaudium Press) Las campanas de la iglesia de San Cornelio y San Cipriano, en la población de La Baconnière, Departamento de Mayenne, en Francia, no sonarán más. Cerca de 200 personas se reunieron este lunes 31 de julio para escucharlas por última vez.
El pasado 15 de abril se celebró una misa en una carpa montada a pocos metros de la edificación religiosa, donde los parroquianos se reunieron para recogerse y recordar los momentos pasados en la iglesia.
Para María, una octogenaria de La Baconnière, la emoción fue muy fuerte a la salida de la última misa. “Me dolió mucho, mucho, que la iglesia sea demolida. Lo lamento de verdad y no comprendo que no se pueda conservar.”
El Padre Franck Viel, quien celebró la misa, vio ese adiós como un homenaje: “Quisimos rememorar a todas las personas que vivieron algo importante en esta iglesia, todos los acontecimientos familiares de la vida, los bautismos, los matrimonios, los entierros.”
La edificación, demasiado frágil, estaba cerrada desde 2014. En 2019 sufrió daños debido a la tempestad Miguel. La alcaldía tomó la decisión de demolerla, lo cual provocó una polémica.
En febrero, habitantes de la localidad realizaron una manifestación afuera de la iglesia, reunidos por una nueva colectividad: “Mayenne defiende su patrimonio”. Sami Fouchard, su portavoz, afirmó: “Es necesario preguntarnos: ¿Cuánto estamos dispuestos a colocar para defender nuestro patrimonio? ¿Estamos dispuestos a destruir todo por razones presupuestales? Es necesario conseguir los fondos y buscar lo que nos permita salvar nuestras iglesias y nuestro patrimonio.”
Poco después de que las campanas se detuvieron, la flecha de la iglesia fue puesta en el suelo por una grúa. La demolición de la edificación continuará durante dos semanas. “Vamos a conservar todos los fundamentos de esta iglesia – afirma el alcalde de La Baconnière, David Besneux –, un monumento a su alrededor, que tendrá una altura de dos metros sobre el perímetro. Estamos trabajando con el CAUE, la Oficina de Arquitectura Urbana y Ambiental. Ya tuvimos una reunión pública hace un mes y vamos a conservar toda la fachada que da hacia la entrada de la población, al nivel del pórtico, para hacer algo ameno.”
Los habitantes reclaman un nuevo lugar de culto dónde colocar nuevamente las campanas y las estaciones del Viacrucis de la iglesia de San Cornelio y San Cipriano, elementos que serán bien conservados por la alcaldía. Una comisión extra-municipal será instalada en otoño para que los habitantes puedan dar sus opiniones. (Con informaciones de France Bleu y France 3).
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