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El Papa alentó a los responsables del patrimonio cultural del Perú a cuidar las obras eclesiales como medios de evangelización y esperanza para la humanidad.
Redacción (16/12/2025 15:57, Gaudium Press) El Santo Padre León XIV dirigió un mensaje a los Delegados Diocesanos de Patrimonio Cultural de las Diócesis del Perú con motivo de su X Encuentro de Responsables de Bienes Culturales, celebrado de forma virtual del 11 al 12 de diciembre de 2025.
En la carta, difundida por la Conferencia Episcopal Peruana CEP, el Pontífice expresó su estima y cercanía a los participantes, recordando que conoce bien este evento, ya que él mismo lo organizó en su etapa como presidente de la Comisión Episcopal de Educación, Cultura y Patrimonio Cultural de la CEP.
El arte, camino hacia el misterio de Dios
El encuentro se desarrolló bajo el lema: El arte debe hacer perceptible, más que las palabras, el misterio de Dios, frase tomada de la Carta a los Artistas escrita por San Juan Pablo II en 1999.
Inspirados en estas palabras, los delegados reflexionaron sobre la dimensión espiritual del patrimonio cultural de la Iglesia.
Según la CEP, este patrimonio no es solo una colección de objetos o monumentos, sino una expresión viva de la fe del Pueblo de Dios a lo largo del tiempo. Cada obra, templo o signo visible, añadieron, “ha nacido del deseo humano de acercarse al misterio divino”.
Formación y nuevas tecnologías al servicio del patrimonio
En su mensaje, León XIV aprovechó la ocasión para enlazar este encuentro con su reciente Carta Apostólica Trazando nuevos mapas de esperanza, publicada en el 60° aniversario de la declaración conciliar Gravissimum Educationis.
Recordó que muchos de los principios allí expuestos —aunque dirigidos principalmente a escuelas y universidades— pueden aplicarse al ámbito del patrimonio cultural, especialmente en lo referente a la formación y actualización constante de sus responsables.
“El Papa abogó por una formación continua, caracterizada por la ‘disposición a aprender y desarrollar conocimientos, y a renovar y actualizar metodologías’”, señala el texto.
Destacó, además, la importancia de combinar los métodos tradicionales con las nuevas tecnologías, incluida la inteligencia artificial, al servicio de la conservación y valorización de los bienes culturales.
El Santo Padre pidió a los profesionales usar estas herramientas con confianza en su potencial, pero también con discernimiento: “Debemos acoger la tecnología con confianza en su gran potencial, pero con cautela, para no ser dominados por ella.”
Patrimonio cultural
León XIV insistió en que el trabajo con el patrimonio cultural no es simplemente una tarea técnica o administrativa, sino una misión evangelizadora que da testimonio de la fe de la Iglesia en la historia.
“Trabajar con el patrimonio cultural es una labor eminentemente eclesial y evangelizadora —afirmó—, que se realiza no tanto a través de palabras, sino mediante las obras de arte y los signos visibles que revelan el paso del Señor ‘Transitus Domini por el mundo.”
Recordó las enseñanzas de San Gregorio Magno, quien escribió al obispo Sereno de Marsella: “Lo que la escritura ofrece a quien lee, la pintura lo ofrece a quien no sabe leer, porque en ella los ignorantes ven aquello a lo que deben conformarse, en ella leen quienes no saben leer. Por lo tanto, la pintura es verdaderamente como la lectura para el pueblo.”
El Pontífice indicó que, en un tiempo en que el conocimiento bíblico y la cultura religiosa han disminuido incluso entre los fieles, el patrimonio cultural puede convertirse en una poderosa vía para anunciar el Evangelio.
Identidad
El Santo Padre también señaló que el patrimonio eclesial no solo transmite valores espirituales, sino que a menudo refuerza la identidad y el sentido de pertenencia de las comunidades.
Como ejemplo, mencionó la devoción peruana al Señor de los Milagros, cuya imagen del Cristo morado del siglo XVII —pintada por un esclavo angoleño— es símbolo de fe y unidad nacional.
“Tuve la alegría de bendecir esta venerada imagen en la Plaza de San Pedro el pasado 19 de octubre”, recordó el Papa, destacando cómo el arte sacro puede unir pueblos y generaciones bajo una misma fe.
Retos técnicos y necesidad de inventarios
León XIV no eludió las dificultades que afrontan los responsables diocesanos del patrimonio, especialmente en tiempos de limitaciones económicas. “No se desanimen ante los desafíos que plantea la gestión del patrimonio cultural —animó el Papa—, aunque los recursos sean escasos y existan otras prioridades urgentes para las Iglesias locales.”
Una misión
Antes de concluir, León XIV expresó su gratitud y reconocimiento a todos los responsables diocesanos del patrimonio cultural, cuya entrega suele pasar inadvertida: “Su trabajo, a menudo oculto e infructuoso, está impulsado por una gran pasión y amor por la Iglesia y su historia.”
Finalmente, el Pontífice impartió su bendición desde el Vaticano el 11 de diciembre de 2025, memoria de San Dámaso, confiando al Señor los frutos del encuentro y el compromiso de quienes custodian el arte, la fe y la memoria del Pueblo de Dios.
Con información de VaticanNews
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