Se trata del P. Blandón, que venía de Israel. También sigue pidiendo la liberación inmediata de Mons. Rolando Álvarez.
Redacción (28/09/2022 11:33, Gaudium Press) Mons. Silvio Báez, Auxiliar de Managua y como él mismo se califica “Obispo exiliado” por el régimen orteguista, informa vía twitter de otro tipo de persecución que enfrenta el clero en su país. Cuenta el caso del P. Guillermo Blandón, sacerdote de la diócesis de Granada-Nicaragua, que había ido en peregrinación a Israel.
El vuelo de regreso pasaba por Miami, y en esa escala le dijeron que no podía viajar, pues su entrada no estaba autorizada.
Mons. Báez publica en su cuenta un ‘pantallazo’ de la negativa de ingreso del P. Blandón por parte de Migración y Extranjería. Es decir, el régimen transforma al país en una cárcel que la gente se autoimpone si no quiere correr esos riesgos.
Asimismo el Obispo auxiliar de Managua no olvida a su hermano ‘en el exilio’, Mons. Rolando Álvarez, Obispo de Matagalpa y recluido en prisión domiciliaria en la capital.
“Como obispo exiliado, comprendo lo que vive mi hermano obispo, Rolando Álvarez. Yo sé lo doloroso que es para un obispo ser privado de estar con su pueblo. Exijo saber dónde y cómo está Rolando, y que sea liberado ya. Ruego a la Iglesia en el mundo entero unirse a esta exigencia”, escribio en su cuenta Twitter el pasado 26.
Como obispo exiliado, comprendo lo que vive mi hermano obispo, Rolando Álvarez. Yo sé lo doloroso que es para un obispo ser privado de estar con su pueblo. Exijo saber dónde y cómo está Rolando, y que sea liberado ya. Ruego a la Iglesia en el mundo entero unirse a esta exigencia. pic.twitter.com/NZpWUK9HcD
— Silvio José Báez (@silviojbaez) September 26, 2022
Acusaciones judiciales contra los compañeros de Mons. Álvarez
Asimismo, se ha conocido que la justicia nicaraguense ha acusado a tres sacerdotes, un diácono, dos seminaristas y un camarógrafo, que permanecieron retenidos con Mons. Álvarez en la curia de Matagalpa, y que junto con él fueron llevados a Managua el 19 de agosto pasado y recluidos en la cárcel El Chipote.
Se desconocen en específico los cargos que se les imputan, pero se sabe que el Estado nicaraguense figura como víctima, por lo que especialistas afirman que probablemente se les impute el delito de menoscabo a la seguridad nacional.
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