Continúa la persecución sistemática contra la Iglesia por parte del régimen Ortega.
Redacción (, Gaudium Press) Sigue la persecución sistemática del régimen Ortega contra la Iglesia en Nicaragua.
El P. Mauricio Valdivia Prado, rector del Colegio Calasanz de Managua, no pudo reingresar a su país tras un viaje a República Dominicana. Ya el año pasado la dictadura habíua suspendido la residencia de otros dos sacerdotes escolapios, que debieron emigrar.
El P. Mauricio es el quinto religioso al que le niegan la entrada al país desde agosto.
Ahora informa La Prensa que el régimen Ortega ha hecho prisionero al joven sacerdote Osman Amador Guillén, que fue director de Cáritas Diocesana en Estelí, una sede bajo la tutela del encarcelado Mons. Rolando Álvarez.
Fuentes anónimas informaron a los medios que el P. Guillén “fue sacado por policías antimotines de la Catedral” de Estelí el pasado viernes a las 10 pm, y se cree que fue trasladado a Managua. El sacerdote fungía como párroco en Wiwili-Nueva Segovia.
Recientemente en una misa había dicho “viva la Iglesia Católica y viva Mons. Rolando José Álvarez”.
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