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Los misioneros católicos fueron secuestrados por un grupo de hombres armados el 1 de febrero en la región central de Nigeria.
Redacción (09/02/2024, Gaudium Press) Una semana después de ser secuestrados en Nigeria, dos sacerdotes claretianos fueron liberados. El anuncio lo hizo el pasado miércoles 7, el Director Nacional de Comunicación Social, padre Michael Umoh.
Un delito cada vez más frecuente en Nigeria
En la tarde del 1 de febrero, el Padre Ken Kanwa CMF, párroco de la iglesia de San Vicente de Paul Fier, Diócesis de Panshin, y su asistente, el Padre Jude Nwachukwu CMF, ambos pertenecientes a los Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María, fueron secuestrados por un grupo de hombres armados en el estado Plateau, región central del país.
El portavoz de la Conferencia Episcopal de Nigeria expresó su profunda preocupación por la seguridad de los católicos en el país, destacando que este tipo de delitos, lamentablemente, se han vuelto comunes en Nigeria, afectando no sólo a los sacerdotes católicos, sino también a religiosos e incluso a ciudadanos comunes y corrientes.
Lucha entre la oscuridad y la luz.
Según el padre Umoh, el principal objetivo de los delincuentes involucrados en esta acción es extorsionar a la Iglesia y a las familias de los secuestrados. El sacerdote lamentó la inacción de las autoridades del país en relación a estos casos. “Nuestro país se encuentra en estos momentos en una situación muy lamentable”, se quejó.
“Y este no es el momento para política, religión o tribu. La cuestión es entre el mal y el bien, es sólo entre la oscuridad y la luz. Oímos hablar de niños en edad escolar secuestrados. Y realmente no se hizo nada. No vimos al Gobierno salir con todas sus fuerzas a condenar esta desagradable situación”, destacó. (EPC)
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