Mons. Gabriel Mestre, el que reemplaza al nuevo prefecto de doctrina de la fe en la sede de La Plata, se muestra como alguien “aggiornato”.
Redacción (, Gaudium Press) Reporta Infocatólica algunas de las cuestionadas declaraciones dadas por el nuevo Arzobispo de la Plata, Mons. Gabriel Antonio Mestre, emitidas siendo obispo de Mar del Plata, y que ahora se ponen en realce al ser escogido como reemplazo en la antigua sede del nuevo prefecto del Dicasterio de la Doctrina de la Fe.
Declaraciones como las que ofreció al portal El retrato de hoy, cuando dijo que “La Iglesia se va aggiornando”, y defendió la comunión a los divorciados:
“La perspectiva de Francisco, que está totalmente instalada en nuestra iglesia, donde un divorciado en nueva unión puede acercarse a confesarse y a comulgar si quiere con total y absoluta libertad. Eso hasta hace siete años no se podía y ahora se puede de manera totalmente libre”, aseguró el prelado.
También no es muy firme el nuevo Arzobispo de la Plata en asuntos de aborto, del que aseguró que aunque la Iglesia lo rechaza, se trata de un “tema delicado, complejo y difícil”. De acuerdo a Mons. Mestre, “por ahí hay gente que ha tenido que huir despavorida hace 30 años atrás de un confesionario”, porque un “cura machirulo se dio la libertad de maltratarla”. Hoy, en cambio, la Iglesia tiene “una mirada distinta por este camino de apertura y misericordia a la mujer que por diversos motivos ha recurrido al aborto”. El prelado no explicó en qué basaba su opinión de que la misericordia era algo prácticamente desconocido en la Iglesia hasta el momento actual.
Asimismmo se enorgullecía en sus declaraciones el nuevo Arzobispo de La Plata de tener “en las estructuras pastorales nombradas a personas homosexuales, casadas incluso con el llamado matrimonio igualitario”, expresión esta última que es comúnmente usada por los defensores del matrimonio homosexual, algo inexistente para la Iglesia.
Mons. Mestre continúa afirmando que esas personas en uniones del mismo sexo “están presentes, cantan en misa, leen, comulgan, no comulgan si quieren, es un tema personal de ellos y están en las estructuras pastorales nombradas por el Obispo”. En el decreto de nombramiento en estructuras pastorales no se menciona el hecho de que “esta persona está casada con una persona del mismo sexo” porque “no debería aparecer; porque debe ser algo natural en la vida de las comunidades”. Entonces, para el prelado, no solo es natural nombrar a una persona en un oficio eclesiástico a pesar de encontrarse en pecado manifiesto, sino que esta situación manifiesta no le impide comulgar.
Reporta Infocatólica que en otra entrevista en vídeo el prelado declaró que había impartido el sacramento de la confirmación a varias “chicas travestis” o “en situación de travestismo” y que eso debería ser “lo más natural, no tiene que sorprendernos”. Estos cambios y los relativos a la comunión de los divorciados suponen, en su opinión, que “no cambia la doctrina, pero el paradigma es bueno. Es nuevo, la Iglesia se tiene que abrir a todas las realidades y no podemos seguir en una suerte de régimen de cristiandad, este…, bueno, que no responde a la realidad de este tiempo”.
Deje su Comentario