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Los habitantes de Bella Vista ya están cansados con las consecuencias del narcotráfico en su comunidad. Pero entre las autoridades hay una pasiva complicidad.
La Paz (25/06/2020 10:19, Gaudium Press) Los obispos bolivianos de la región amazónica elogiaron a residentes locales que capturaron una avioneta que trasportaba droga.
Todo ocurrió así:
En marzo, en Bolivia como en muchos lugares se impuso la cuarenta con ocasión del virus que causa el Covid 19. Eso mismo fue efectivo en Bella Vista, una población de 5.000 habitantes que queda en la frontera con Brasil. Allí fue cerrado el aeropuerto también.
Pero los traficantes desafiaron la prohibición de aterrizaje, y por eso los residentes bloquearon la pista con cercas de alambre. Sin embargo los vuelos continuaron, por lo que el 18 de junio pasado, capturaron una avioneta y la llevaron hasta la alcaldía en la plaza central, exigiendo que las autoridades tomaran acciones.
Más tarde llegó la policía anti-narcóticos, y se encargaron de la investigación y tomaron control de la avioneta. Testigos afirman que detuvieron y capturaron a una persona que trabajaba como vigilante en el hangar del aeropuerto, pero después la policía anti-narcóticos dijo que no había capturado a nadie, lo que demuestra, en palabras de Mons. Eugenio Coter, obispo de Riberalta, que no se está tomando el caso en serio.
Mons. Coter se preocupó por las represalias que podrían sufrir los habitantes de Bella Vista, y por ellos los obispos de la región amazónica emitieron una declaración el pasado 22 de junio, exigiendo de las autoridades que se proteja a la población, además de advertirles que no hablar del tráfico de drogas “nos hace cómplices de aquellos que se aprovechan de la producción de droga con el costo conexo de vidas y valores para las próximas generaciones”, decían los obispos.
Proteger a la población. Evitar que se siga dañando a la juventud
“Expresamos nuestro completo apoyo y solidaridad con la corajuda población de la comunidad de Bella Vista, que se erigió contra el uso y el abuso de la población por parte de intereses ilegales ligados al tráfico de drogas en la región”, continuan.
El negocio siniestro de la droga se ensaña principalmente con los jóvenes, a quienes hace “peones del tráfico”, además de causar muchos adictos, destrozando sus vidas.
Mons. Coter afirma que los residentes de Bella Vista le cuentan que han contabilizado hasta cinco vuelos por noche. Los pobladores ya están cansados de los problemas de adicción entre sus jóvenes, los robos, la prostitución conexa, la contratación de asesinos, etc. Y todo ello es permitido por “esta pasiva complicidad” de las autoridades.
Con información de CNS
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