Menú 
La decisión de la Corte Suprema afecta las leyes civiles y puede tener efectos profundos para los católicos ante la ideología de género.
Corte Suprema de Estados Unidos. Foto: Guyyoung1966
Washington (16/06/2020 18:39:11, Gaudium Press) El Presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, Mons. José Gómez, emitió una declaración en la que lamentó una decisión de la Corte Suprema de su país. El tribunal redefinió el alcance de la palabra «sexo» en las normas antidiscriminación del ordenamiento civil para incluir las diferentes orientaciones sexuales. Esta sentencia podría tener serios efectos en la imposición de la ideología de género sobre los creyentes.
«Me preocupa profundamente que la Corte Suprema de los Estados Unidos haya redefinido efectivamente el significado legal de ‘sexo’ en la ley de derechos civiles de nuestra nación», expresó el Arzobispo. «Esta es una injusticia que tendrá implicaciones en muchas áreas de la vida». El prelado lamentó que el orden legal ignore de esta forma el designio de Dios en la creación y afecte a la familia, «el primer bloque de construcción de la sociedad».
Corte Suprema no tenía necesidad de redefinir
El prelado recordó que la Iglesia enseña la necesidad de aceptar la propia identidad corporal y agradecerla a Dios. De igual manera advirtió que el ser humano no puede hallar la felicidad siguiendo «un camino que es contrario al plan de Dios». De igual manera, comentó que la Iglesia reconoce la dignidad de cada ser humano y rechaza cualquier forma de discriminación.
«Proteger a nuestros prójimos de la discriminación injusta no requiere redefinir la naturaleza humana», aclaró, sin embargo. La Iglesia ya había argumentado ante la Corte Suprema que la ley no se refiere a la orientación sexual cuando emplea la palabra «sexo». También expuso que la «discriminación por orientación sexual» es un concepto distinto al de la «discriminación por sexo» y que ambos no deberían ser equiparados. Finalmente, alertó a los magistrados que la redefinición del término crearía «numerosos conflictos con muchos creyentes y con sus instituciones en el lugar de trabajo».
A pesar de que esta decisión no está relacionada con varios casos que involucran a escuelas católicas y esperan su resolución ante la Corte Suprema, la sentencia crea un antecedente que hace temer una derrota en los tribunales. Las escuelas esperan mantener la protección a su derecho a elegir libremente a los profesores y exigir de ellos un testimonio público coherente con la doctrina de la Iglesia.
Con información de USCCB.
Deje su Comentario