Los Arzobispos de Valencia de Oviedo han realizado declaraciones sobre la ley de educación que se suman a una nota de la Conferencia Episcopal.
Madrid (23/06/2020 14:49:19, Gaudium Press) La nueva Ley de Educación (LOMLOE), que se tramita actualmente en España, es fuente de preocupación para los Obispos del país. En ausencia de canales de diálogo para participar en la iniciativa, la Conferencia Episcopal Española ha expresado su preocupación por el respeto del derecho de los padres a definir los contenidos de la educación de sus hijos y el futuro de la asignatura de Religión.
Ley de educación con padres de familia y creyentes
La comunicación de la Comisión Episcopal para la Educación y Cultura de la Conferencia Episcopal declaró haber analizado el proyecto de ley. «Nos parece tener que insistir en la necesidad de proteger y promover el derecho a la educación y la libertad de enseñanza, tal como se explicitan en la Constitución y en su interpretación jurisprudencial», indicó. «Si el Estado tiene una tarea principal en la defensa y la promoción del bien de la educación para todos, no es sin embargo el sujeto del derecho educativo».
La Comisión pidió preservar y valorar la asignatura de Religión como parte de la educación integral de los estudiantes. «No puede excluirse del ámbito escolar la educación de la dimensión moral y religiosa de la persona, de modo que ésta pueda crecer como sujeto responsable y libre», afirmó. También recordó la identidad cultural cristiana del país, ya que el estudiante hace parte de una tradición y una cultura. » La cual, en el caso de nuestra sociedad, como en el de los diferentes países europeos, no se entendería sin conocer y comprender la fe cristiana».
Una ley liberticida
Además, los Arzobispos de Valencia, Card. Juan Antonio Cañizares y de Oviedo, Mons. Jesús Sanz Montes, han declarado los peligros de una ley educativa sin participación de los creyentes. «Deseo que no se apruebe la Ley de Educación», expresó el Card Cañizares en a homilía por los 50 años de su sacerdocio. «Las imposiciones llevan a una dictadura (:…). En la nueva Ley quien educa es el Estado y a quienes compete educar a los hijos es a los padres».
Mons. Sanz Montes denunció por su parte «las pretensiones de quienes, desde la política más partidista, quiebran esta libertad en aras del control de las futuras generaciones». Desconocer el deber y derecho de los padres a encargarse de forma directa de definir el tipo de educación de sus hijos equivaldría al «control más usurpador, la maniobra más despótica, de quienes ven en la educación un instrumento de poder».
«Es justo que alcemos nuestra voz para reivindicar una ley de educación que no sea liberticida, sino respetuosa con los primeros depositarios de la tutela y responsabilidad educativa como son los padres de nuestros niños y jóvenes», exhortó el prelado.
Con información de Conferencia Episcopal Española, AVAN e Infocatólica.
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