Papa rezó por las víctimas de las graves inundaciones al sur del Brasil

Al final de la oración mariana del Regina Caeli, Francisco oró por el pueblo de Rio Grande do Sul, afectado por devastadoras inundaciones.

Foto: Vatican News.

Redacción (, Gaudium Press) Al final de la oración mariana del Regina Caeli, ayer domingo 5 de mayo, que versó sobre la amistad con Jesús, el Papa Francisco oró por el estado brasileño de Rio Grande do Sul, afectado por devastadoras inundaciones.

Las inundaciones de Rio Grande do Sul han provocado la muerte de cerca de 100 personas y obligaron a aproximadamente 100.000 a abandonar sus hogares.

En sus llamamientos tras la oración del Regina Caeli de ayer, el Papa tuvo un pensamiento especial para el pueblo de Rio Grande do Sul: “Quiero asegurar mi oración por las poblaciones del estado de Rio Grande do Sul, en Brasil, afectadas por grandes inundaciones. Que el Señor acoja a los difuntos y consuele a sus familiares y a quienes tuvieron que abandonar sus hogares”.

• Lo ocurrido

El río Guaíba, que atraviesa la ciudad de Porto Alegre, capital de Rio Grande do Sul y donde viven 1,4 millones de personas, alcanzó una altura récord de 5,09 metros, muy por encima del pico histórico de 4,76 metros registrado durante las inundaciones de 1941. El agua continúa subiendo en la metrópoli completamente inundada y en una centena de localidades. En parte, las inundaciones aislaron a Porto Alegre del resto del país.

Las consecuencias son dramáticas: medio millón de personas se vieron directamente afectadas por el desastre, al menos 103 personas están desaparecidas, más de un millón de hogares están sin agua y la magnitud de la devastación es hasta ahora incalculable, según las autoridades locales. Existe gran preocupación por la falta de alimentos y la interrupción de la producción agrícola en esta región.

Se espera que las lluvias, que amainaron durante la noche del sábado al domingo, persistan durante las próximas 24 a 36 horas y las autoridades advierten sobre deslizamientos de tierra. Según el climatólogo Francisco Eliseu Aquino, las lluvias se ven favorecidas por “una combinación desastrosa” formada por el fenómeno meteorológico de El Niño, cambios climáticos y otros eventos extremos.

La solidaridad de la Iglesia

Ante estas inundaciones, cuyas consecuencias aún son incalculables, la Iglesia ha llamado a la oración y a la solidaridad. Una nota de solidaridad fue emitida por la Arquidiócesis de Porto Alegre, uniéndose en comunión con la Regional Sur 3 de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil, en un esfuerzo común de reconstrucción y esperanza. Además de las instituciones gubernamentales, instituciones militares y civiles se han dedicado a la defensa de la vida, y las propias comunidades eclesiásticas han abierto “sus puertas para acoger a quienes lo han perdido todo”. Pero el pedido del Arzobispo de Porto Alegre, Mons. Jaime Spengler, va más allá: “En este Año de Oración de preparación al Jubileo de la Iglesia 2025, instamos a las comunidades eclesiales a unirse en oración, según las posibilidades, ante el Santísimo Sacramento, que es el gran símbolo de comunión y de compartir, renovando nuestro compromiso como peregrinos de la esperanza”.

Con información de Vatican News.