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Se llamaba Tuncer Murat Cihan, de 52 años. “Exigimos firmemente que se garantice mayor seguridad a nuestras comunidades e iglesias”, dijo el arzobispo Martin Kmetec de Izmir, presidente de la Conferencia Episcopal.
Redacción (31/01/2024 12:28, Gaudium Press) La única víctima del ataque del domingo pasado a una iglesia católica en Estambul era un musulmán que asistía regularmente a misa, según contaron sus familiares.
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Tuncer Murat Cihan, de 52 años, murió bajo el fuego de dos encapuchados que entraron a la iglesia de Santa María, en el distrito Sariyer de Estambul, cuando se estaba celebrando la misa de las 11:00 am, con una presencia de 40 personas. Se encontraba allí también el cónsul polaco en Estambul.
Cihan tenía una discapacidad mental, y asistía a misa católica los domingos, en los meses previos a su muerte en el ataque terrorista, dijeron dos de sus familiares a los medios turcos locales.
“Vino a la iglesia conmigo”, expresó Kazım Aydemir, el tío de la víctima, a la Gazeta Duvar. “Era muy querido por la comunidad. Fue asesinado en vano. Estamos muy tristes”, afirmó.
Cihan fue enterrado el pasado 29, en un lugar de culto musulmán aleví. El obispo católico Massimiliano Palinuro, vicario apostólico de Estambul, asistió al funeral de Cihan.
“Era como un ángel puro. Perdió la vida por la comunidad de allí”, dijo Mons. Palinuro en el funeral, según el medio de comunicación turco BirGün.
“Solía venir a la iglesia. Lo queríamos como a un amigo”, dijo el obispo.
Según el alcalde local del distrito Sariyer de Estambul, Sukru Genc, aproximadamente entre 35 a 40 personas estaban dentro de la iglesia asistiendo a misa en el momento del ataque, incluido el cónsul general polaco Witold Lesniak y su familia.
“Cuando sonó el primer disparo, todos se tiraron al suelo. Después de la segunda explosión, el arma se atascó y ellos [los atacantes] salieron. No se sabe qué hubiese sucedido después, si el ataque hubiese continuado”, dijo el alcalde local del distrito Sariyer de Estambul, Sukru Genc, donde está ubicada la iglesia.
El grupo terrorista Estado Islámico se atribuyó la responsabilidad del ataque de Estambul a través de su medio de comunicación, Aamaq, según Associated Press. Dos sospechosos, uno de Tayikistán y el otro ciudadano ruso, fueron arrestados.
La Conferencia Episcopal de Turquía pidió oraciones por la víctima y su familia.
“Exigimos firmemente que se revele la verdad y se garantice mayor seguridad a nuestras comunidades e iglesias. Pedimos a todos que no se propaguen la cultura del odio ni la discriminación religiosa”, dijo el arzobispo Martin Kmetec de Izmir, presidente de la Conferencia Episcopal de Turquía.
Con informaciones de CNA.
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