Primer ministro inglés se casa… por la Iglesia católica

Es la primera vez que un primer ministro británico en funciones contrae matrimonio, desde que lo hizo Robert Banks Jenkinson en 1822.

Londres (31/05/2021 11:33, Gaudium Press) Ya lo decía Shakespeare, que siempre hay algo de católico en la anglicana Inglaterra… (Algunos incluso sustentan que al propio Shakespeare…)

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Es cierto que la vida sentimental del Primer Ministro inglés Boris Jonhson, se parece a la de las vueltas de una intrincada montaña rusa, llenando con frecuencia y delectación de muchos y muchas los espacios de frívolas publicaciones del corazón. Pero ahora el asunto es más serio, porque tiene que ver con lo que dice y es la Iglesia.

En ceremonia a puerta cerrada y con pocos asistentes, Boris Johnson ha contraído matrimonio católico con Carrie Symonds, en la Catedral de Westminster, el pasado 29 de mayo. El oficiante fue el P. Daniel Humphreys, el mismo sacerdote que bautizó a su hijo Wilfred en septiembre del año pasado. Es la primera vez que un primer ministro británico en funciones contrae matrimonio, desde que lo hizo Robert Banks Jenkinson en 1822.

Las declaraciones emitidas por el portavoz de la Catedral de Westminster, al Sunday Times, quieren tener la precisión y concisión del Big Ben:

“Los novios son parroquianos de la Catedral de Westminster y católicos bautizados”. “Se tomaron todas las medidas necesarias, tanto en la Iglesia como en la ley civil, y se completaron todas las formalidades antes de la boda. Les deseamos toda la felicidad”. Period. Pero realmente no fue el final…

Polémica

La noticia de la ceremonia se regó como pólvora y provoca serios debates.

El P. Mark Drew, sacerdote en la Arquidiócesis de Liverpool, se preguntaba en su cuenta twitter: “¿Alguien puede explicarme cómo ‘Boris’ Johnson, que dejó la Iglesia Católica mientras estaba en [la escuela] Eton y quien se divorció dos veces, puede casarse en la Catedral de Westminster, mientras que tengo que decirle a los católicos practicantes de buena fe que quieren un segundo matrimonio en la Iglesia que esto no es posible?”.

De hecho, aunque bautizado como católico a instancias de su madre, este neoyorkino (sí) renunció a la Iglesia cuando estaba en la prestigiosa Eton para hacerse anglicano. El anterior alcalde de Londres y primer ministro desde julio de 2019, había dicho que su fe “viene y va”.

En 1987 se casó con la hija de un escritor, matrimonio que fue anulado cinco años después. Luego se casó con la abogada Marina Wheeler, con quien tuvo cuatro hijos. Se afirma que tuvo una hija extra marital con una consultora de arte. En septiembre de 2018 se separó de Wheeler.

Cuando fue elegido primer ministro Boris Johnson ya vivía con Carrie Symonds, quien trabajaba en el Partido Conservador desde 2009 y colaboró con la campaña de Johnson para ser reelegido alcalde en el 2012. Symonds ha sido más constante en su afirmación de fe católica.

La necesidad de evitar el escándalo

En declaraciones a CNA, el padre Drew de Liverpool acepta que el matrimonio no era contrario a la ley canónica.

“Pero en decisiones de este tipo, la necesidad de evitar el escándalo es primordial en la tradición católica. En casos de tan alto perfil, en lugar de mostrarse más complaciente, la Iglesia debería poner el listón más alto”, comentó. De pronto – dicen los sarcásticos – en los días actuales Enrique VIII podría haberse paseado cogido de la mano con Ana Bolena en una Canterbury aún católica. Pero esto no asegura que después no le hubiera cortado la cabeza…

Añadió el P. Drew que le preocupaba el tipo de imagen que proyectaba la Iglesia.

“Estoy viendo tantos comentarios en los que católicos sinceros se sienten traicionados, y otros de personas hostiles a la Iglesia que están aprovechando alegremente otra oportunidad para criticarla, con razón o sin ella, por eso que ellos ven como su preferencia por el poder y la riqueza”, afirmó.

‘Doctores tiene la Madre Iglesia’ se solía decir.

Ocurre que como Johnson fue bautizado católico, sus matrimonios no católicos no son reconocidos por la Iglesia, a diferencia de lo que ocurre con alguien que se convirtiera al catolicismo después casarse, caso en el cual su unión anterior sería válida ante la Iglesia.

Queda por ver si el matrimonio de Johnson implica un reconocimiento de éste de su actual condición como católico o no, lo que sería de suponer. Pero es claro que un mayor esclarecimiento sobre las disquisiciones canónicas en cuestión, ayudaría a tranquilizar conciencias y evitar el escándalo. Porque lo que Dios ha unido no lo separa el hombre, algo muy serio. (Gaudium Press / Saúl Castiblanco)

Con información de The Tablet y CNA