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San Erico fue reconocido como rey por casi toda Suecia en el año 1150.
Redacción (18/05/2021 06:51, Gaudium Press) Hoy conmemoramos a un rey, que también fue mártir, San Erico, rey de Suecia.
San Erico fue reconocido como rey por casi toda Suecia en el año 1150.
Este santo construyó o terminó, en Upsala, la primera gran iglesia que existió en el país.
Es conocido también el “Código del Rey Erico”, que es una codificación de las antiguas leyes y constituciones del reino.
Luchó contra los paganos de Finlandia, que invadían con frecuencia sus territorios, pero a estos los derrotó. Y entonces pidió al obispo de Upsala, San Enrique, que se quedase para evangelizar Finlandia. Ellos habían ido hasta allá en medio de la lucha. Es pues en buena medida, el artífice de la conversión al cristianismo de todo un pueblo.
La traición
Entre los nobles del reino comenzó a gestarse una conspiración. Esos nobles entraron en componendas con el hijo del rey de Dinamarca, Magnus para destronar a San Erico.
Un día de la Ascensión, cuando San Erico se encontraba asistiendo a misa, le avisaron que se acercaba un ejército danés, al que se habían juntado algunos suecos. El rey respondió: “Esperemos a que termine la misa; ya celebraremos en otra parte el resto de la fiesta”.
Termina la eucaristía, y sale el rey San Erico a la cabeza de sus guardias para hacer frente a los daneses. Los conspiradores logran abatirlo, y lo decapitan. Esto ocurrió el 18 de mayo de 1161.
El recuerdo de este rey se conservó desde entonces como un símbolo de la nacionalidad sueca. Su bandera presidió todas las grandes batalles. Las reliquias del monarca están en Upsala y su efigie se encuentra en el escudo de armas de Estocolmo.
Con información de El Testigo Fiel
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