Los milagros que se narran del santo obispo de Arlés son innumerables.
Redacción (05/03/2023 10:17, Gaudium Press) San Virgilio de Arlés nace en Gascuña, hoy Francia, pero se educa en el monasterio de San Honorato, en una de las dos islas que quedan frente a Cannes. San Virgilio fue monje y abad de ese monasterio.
Un día llegaron hasta la playa de la isla unos marinos en un extraño navío, que se bajan y le saludan por su nombre. Le dicen que su fama de santidad se había difundido mucho, y lo invitaban a seguir hasta Jerusalén, lugar en el que haría mucho bien y alcanzaría alto grado de perfección. San Virgilio no se dejó engañar, hizo una señal de la cruz y dijo: “Las mañas del enemigo no pueden engañar a los soldados de Cristo y vosotros sois totalmente impotentes contra los protegidos de Dios, porque la oración ha arrojado al dragón de la Isla de San Honorato y el demonio no tiene en ella ningún poder para hacer mal”. Después de dicho esto, barco y marinos desaparecen.
San Virgilio es nombrado obispo de Arlés y recibe el palio del Papa Gregorio I, San Gregorio Magno. Gobernó su diócesis con gran vigor y deseo de convertir a la mayor cantidad posible.
Construyó varias iglesias en Arlés, incluso una en honor a su patrono San Honorato.
En la construcción de esta iglesia se dio un hecho milagroso. Los obreros no estaban pudiendo llevar unas columnas al lugar que les era destinado. San Virgilio se dio cuenta, pero en ese momento tuvo una visión, en la que contemplaba un demonio oscuro que bajo la columna que impedía que esta fuera transportada.
Entonces el santo increpó al demonio, lo exorcizó y este huyó dejando una estela pestilente que hizo que los obreros advirtiesen su presencia y la acción que había acometido San Virgilio. Muchos otros milagros obró este santo obispo, como curaciones, resurrección de muertos, etc.
El pueblo le tenía mucha confianza, y decía que mientras estuviese con ellos, nada malo les podría ocurrir.
Fue enterrado en la iglesia de San Salvador, que él mismo había construido.
Con información de las Vidas de los Santos de Butler.
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