Se ordenan 3 sacerdotes y 2 diáconos en Ucrania del Seminario Redemptoris Mater

La ordenación tuvo lugar en la catedral de la Exaltación de la Santa Cruz, en Uzhgorod.

Foto: Vatican media

Redacción (18/06/2024, Gaudium Press) Aunque propiamente en Uzhgorod no se combate, la angustia se siente.

Son muchos los que se han refugiado aquí huyendo de otras zonas de Ucrania, pero otros son llamados al frente, según cuenta en entrevista a Vatican News el Padre Francesco Andolfatto, rector del seminario eparquial misionero local Redemptoris Mater.

Pero en este sitio que también es de dolor, se abrió un espacio de alegría, con la ordenación el pasado sábado 8 de 3 sacerdotes y 2 diáconos, que tuvo lugar en la catedral de rito greco-católico de la Exaltación de la Santa Cruz.

Los tres nuevos sacerdotes son: Andrii Stebivka, de Uzhgorod, Viktor Bodnar, de Vinnitsa y João Miguel Perozzi Jorge, de Brasil. Por su parte, Vitalii Fedynyshynets, de Uzhgorod y Julio Rafael García Maldonado, originario de Honduras, fueron ordenados diáconos.

Esperanza en medio de la guerra

“Para nosotros – afirma el Padre Andolfatto – estas ordenaciones fueron una alegría porque estos jóvenes están entre los primeros que comenzaron el seminario hace 11 años, en 2013. Es una gran alegría en este tiempo de guerra ver que la Iglesia avanza, continúa, rejuvenece. Y es un signo de esperanza enviar a los jóvenes a una misión pastoral y estar aquí, entre la gente, en medio de la gran tensión que se siente debido a la guerra”.

Los nuevos sacerdotes permanecerán en la parroquia, en la diócesis de Mukačevo para la que fueron ordenados, pero dentro de 2 o 3 años, o incluso más, seguramente irán a la misión porque “nuestro Seminario prepara para la evangelización en todo el mundo”.

Se trata de jóvenes de diferentes orígenes geográficos, todos ellos ordenados según el rito católico bizantino e incardinados en la Eparquía greco-católica de Mukačevo, que incluye la región de Transcarpatia, de la que Uzhhorod es capital.

“La misión en este momento en Uzhgorod –subraya el sacerdote– consiste en la presencia de una Iglesia que no abandona a las personas, sino que lleva la Palabra de Dios, una palabra de reconciliación, de perdón, de presencia del Señor. Es muy importante haber estado aquí: muchos se quedaron porque nosotros también nos quedamos.”

Con información de Vatican News.