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El Cardenal, que se retiró temporalmente de sus funciones, fue citado en una demanda colectiva contra la Arquidiócesis de Quebec, presentada en 2022.
Foto: Vatican Media
Redacción (23/05/2024, Gaudium Press) La Santa Sede ha declarado, tras investigación canónica, que no ha encontrado pruebas de que el Cardenal Gérald Lacroix, Arzobispo de Quebec, haya incurrido en “conducta indebida de abuso”. Después de esta investigación no se realizará ningún procedimiento canónico adicional.
El Cardenal, que se retiró temporalmente de sus funciones, fue citado en una demanda colectiva contra la Arquidiócesis de Quebec, presentada en 2022, que incluye a más de 100 personas que alegan haber sido abusadas por 88 sacerdotes y empleados de la arquidiócesis desde 1940.
Las acusaciones contra el purpurado se hicieron públicas a finales de enero, a las que el Cardenal respondió como “infundadas”. Se trataba de hecho ocurridos entre 1987 y 1988, de cuando la presunta víctima tenía 17 años.
A continuación la declaración de la Santa Sede:
En relación con las conclusiones de la investigación canónica preliminar sobre una acusación anónima contra el Cardenal Gérald C. Lacroix, Arzobispo de Quebec
El 8 de febrero de 2024, el Santo Padre encargó a André Denis, juez retirado del Tribunal Superior de Quebec, el mandato de esclarecer una acusación formulada en el contexto de una demanda colectiva contra la Archidiócesis de Quebec.
El informe de la investigación canónica preliminar llevada a cabo por el juez concluyó el 6 de mayo de 2024 y fue entregado al Santo Padre en los días siguientes.
A la luz de los hechos examinados por el juez, el informe no permite identificar ninguna acción que constituya conducta indebida o abuso por parte del Cardenal Gérald C. Lacroix. En consecuencia, no se prevé ningún procedimiento canónico adicional.
El Santo Padre ha autorizado al juez André Denis a emitir una declaración resumiendo los elementos de su investigación y también le ha autorizado a responder cualquier pregunta que pueda surgir sobre el asunto.
El Santo Padre extiende su profundo agradecimiento al juez André Denis por haber completado, dentro del tiempo prescrito, el mandato que se le confió y que llevó a cabo con imparcialidad en el contexto de la demanda colectiva presentada contra la Archidiócesis de Quebec.
Con información de Infocatólica.
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