La Santa Sede no está exenta de la crisis económica mundial, consecuencia de la pandemia. Ya prevé tres posibles escenarios.
Ciudad del Vaticano (11/05/2020 11:37, Gaudium Press) La Santa Sede no está exenta de la crisis económica mundial, consecuencia de la pandemia del Covid-19. Por esta razón, ya está pronosticando varios escenarios, siendo el más pesimista el que prevé un déficit del 175%.
El propio Papa Francisco ha aconsejado a los presidentes de los dicasterios vaticanos ser ahorrativos y eliminar gastos innecesarios. Expertos también han sugerido concentrar toda la liquidez de los organismos a través de la APSA, que es la institución responsable de pagar los gastos de cada dicasterio, a partir de los salarios.
Los escenarios
Según se detalla en Il Messaggero, el Dicasterio de la Economía ha realizado un estudio que habla de tres posibles escenarios de la crisis económica en la Santa Sede este 2020.
Escenario 1. De acuerdo con el estudio, es es el más optimista, ya que no implicaría prejuicios de las disposiciones emitidas para la contención de los costos administrativos. En él se pronostica una reducción entre el 30 y el 50% de los ingresos ordinarios, con un incremento del déficit del 28%.
Escenario 2. Es más moderado, ya que advierte sobre una disminución de las fuentes de ingreso entre el 50 y el 60%, con medidas para controlar el gasto en un 3% e introduciendo una acción correctiva sobre los salarios. Si esto ocurre, el déficit podría llegar al 83%.
Escenario 3. Es el más pesimista,ya que se alcanzaría un déficit del 175%. De darse este escenario, los tiempos de recuperación serán más lentos, ya que habría una drástica reducción entre el 50 y el 80% de las fuentes ordinarias de ingresos.
Crear centro único de servicio
El estudio sugiere al Papa fortalecer la posición financiera del APSA, concentrando los fondos de los dicasterios para evitar trasladarlos a otras instituciones financieras; pero exceptuando aquellos vinculados con proyectos, actividades o donaciones.
El medio de comunicación revela, en este sentido, que podrían transferirse a la APSA los fondos líquidos de los dicasterios que actualmente se encuentran con el IOR.
Incluso los técnicos del dicasterio de la Economía señalan que sería positivo crear “un centro único de servicio especializado en el cual converjan las disponibilidades financieras de la entidades”. Todo, con el fin de mejorar las ganancias de la gestión financiera que se pondrían a disposición de la Santa Sede.
Mayores políticas de gestión
Para los expertos es necesario que el Vaticano ponga en marcha mayores políticas de gestión de los recursos, ya que, a diferencia de otros estados, tiene pocas alternativas para responder ante una crisis económica, que son las donaciones de los fieles, el producto de actividad comercial e inversiones.
Además, el flujo de los recursos es relativamente estable, con alrededor de 270 millones de euros, mientras que los gastos son de 320 millones. De estos últimos, el 44% refieren a un promedio de 3 mil empleados, más el mantenimiento de las nunciaturas, el de los activos inmobiliarios e impuestos pagados por la administración de la propiedad.
Con solo caridad tampoco se podría solventar la crisis, ya que esta asciende a 24 millones de euros por año, sin tener en cuenta la cifra de las obras de caridad realizadas con la colecta del Óbolo de San Pedro. (Ver: Trasladan colecta del Óbolo de San Pedro para el 4 de octubre).
Con más políticas de gestión, como indican los técnicos, “se garantiza la flexibilidad en el sistema de remuneración, de tal manera que pueda recompensar las habilidades y los más merecedores, y poder lidiar con períodos críticos como los actuales con herramientas adecuadas”.
Con información de Il Messaggero.
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