sábado, 23 de noviembre de 2024
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¿Y qué pasó con Rupnik?

También se está a la espera de conclusiones sobre los grupos de reflexión acerca de la permanencia de las obras del ex jesuita.

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Foto: gesuiti.it

Redacción (08/09/2023 15:39, Gaudium Press) ¿Y qué pasó con el Padre Marko Rupnik? Ya se sabe que no es jesuita, pero eso no es sino el inicio de la actual historia.

Hace unos días, la diócesis de Laussane-Ginebra-Friburgo, de quien es pastor Mons. Charles Morerod, antiguo miembro de la Comisión Teológica Internacional, creó un grupo de reflexión sobre el “Chemin de Joie” (Camino de la Alegría) ubicado en su cantón, que es un recorrido de 13 mosaicos en fachadas de iglesias, y que a imitación de un Viacrucis (Chemin de la Croix) busca que los fieles reflexionen sobre contenidos de la fe. Solo que, según informó Zenit, estos mosaicos fueron realizados por “artistas de un centro peruano en colaboración con el Centro de Roma, del que Marko Ivan Rupnik fue director durante mucho tiempo”.

El mundo católico estará atento a las conclusiones de este grupo de reflexión, junto a las del ya constituido en el Santuario de Lourdes, del que se esperan definiciones antes de finalizar el año.

Por en cuanto, no parece temerario afirmar que se puede anticipar la opinión de la gran mayoría de las víctimas.

El pasado 7 de septiembre Federica Tourn de Domani, una de las primeras que a finales del año pasado sacó a la luz el ‘caso Rupnik’, publicó declaraciones de una de las víctimas del ex jesuita, que afirmaba que “no se puede separar el arte de Rupnik de la violencia psicológica, sexual y espiritual ejercida contra las víctimas, que a veces eran también sus primeros modelos”, afirmaciones estas últimas que acercan más el caso Rupnik al del sacerdote francés Louis Ribes, quien entre los años 50 y 70 del siglo pasado abusó de numerosos infantes, varios de los cuales le sirvieron de modelos para cuadros y vitrales. La diócesis de Lyon ya retiró de las iglesias los cuadros de Ribes, pero la decisión de los vitrales requiere del permiso de los municipios, pues los templos en ese país pertenecen al Estado.

Leer también: ¿Las obras del jesuita Rupnik? Todo indica que mejor no, por respeto y cuidado a las víctimas, a todas

La sensibilidad de las víctimas también se expresó por voz sacerdotal, en Francia, cuando a inicios de año el Padre Michel, sacerdote y víctima de abuso cuando niño, decía que “pienso en las víctimas de Ribes, en el horror que deben sentir ante su imagen de niño expuesto por su verdugo”.

Sin embargo, el tema Rupnik reviste la complejidad de que si bien todo el mundo da por sentado que el ex jesuita es culpable de abuso, y abusos graves y continuados, por las múltiples declaraciones de víctimas que han salido a la luz, en la actualidad no se encuentra suspendido o penalizado, lanzando así una sombra de duda sobre el real compromiso de la Iglesia por las víctimas.

Y aunque corrieron rumores de que estaría pronto a incardinarse en alguna diócesis de un país báltico, estos no se han confirmado, manteniendo la situación y el destino del sacerdote bajo el manto del misterio, pero también de una indefinición que no es de recibo de las muchas víctimas de abuso sexual que están atentas a cualquier desenlace de esta materia.

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