La Arquidiócesis de Valencia celebró con numerosas actividades la fiesta de San Vicente Ferrer

Valencia (Lunes, 16-04-2012, Gaudium Press) La Arquidiócesis de Valencia vive verdaderos días de fiesta de la fe en la celebración de la solemnidad de San Vicente Ferrer, santo dominico oriundo de esta ciudad y especialmente reconocido por sus predicaciones y abundantes milagros. El Arzobispo del lugar, monseñor Carlos Osoro, presidió hoy una Eucaristía pontifical y una procesión por las calles del centro histórico de Valencia con una imagen del Santo Patrono de la Comunidad Valenciana. La liturgia de la solemnidad es el punto culminante de una extraordinaria serie de actividades en conmemoración de este santo valenciano.

Solemne Eucaristía en la Catedral de Valencia

Biblia usada por San Vicente Ferrer

Niños representan «els Miracles» del santo valenciano.

El tapiz floral de San Vicente Ferrer en la casa natalicia.

Uno de los acontecimientos sin precedentes es el traslado de una Biblia manuscrita usada por el santo, que ostenta anotaciones que el mismo San Vicente hizo para sus predicaciones y que incluyen relatos de vivencias personales. Esta reliquia será llevada el sábado 21 de abril a la localidad de Llíria, donde el santo hizo brotar una fuente de forma milagrosa. La Biblia será recibida en la iglesia de la Santísima Sangre, lugar en el cual predicó el santo, donde se celebrará una solemne Eucaristía. La reliquia se conserva en la Catedral de Valencia desde el siglo XVI y sólo había sido salido del templo en 1936 para protegerlo de la persecución religiosa.

Otro hecho notable es la transcripción latina y traducción del proceso completo de canonización de San Vicente Ferrer a la lengua española, fruto de un trabajo de más de ocho años llevado a cabo por religiosos dominicos. El manuscrito contiene los testimonios de más de 400 testigos, al igual que el registro de 860 milagros concedidos por intercesión del santo. El documento también contiene detalles de la «vida cotidiana y predicaciones del santo en sus últimas décadas de vida», declaró el historiador dominico Alfonso Esponera al Semanario Paraula.

El proceso de San Vicente Ferrer fue escrito en latín bajo medieval, en términos técnicos notariales y con expresiones complejas de la época. La traducción fue aún más difícil por el uso habitual de abreviaturas y la escasez de signos de puntuación. El proyecto, puesto en marcha en 2004 y concluido el pasado 12 de abril, constituye un patrimonio de gran valor que permitirá a muchos católicos conocer de primera mano el testimonio de vida y la doctrina del santo dominico.

Pero más allá de los documentos históricos y las reliquias que la Iglesia valenciana ha conservado de su santo, el cariño y fervor que se encuentra profundamente arraigado en el pueblo católico encuentra sus propias expresiones durante la solemnidad. Los tradicionales altares se levantan durante los días de fiesta y en ellos los niños representan «els Miracles», o narraciones de los milagros más célebres de San Vicente Ferrer.

En esta oportunidad, 150 niños y jóvenes menores de 14 años ya participaron en ocho de estos altares, de un total de 12 en la ciudad de Valencia. Los demás altares, que incluyen otros seis en otras localidades de la comunidad valenciana, llevarán a cabo sus presentaciones en los días siguientes. El altar más antiguo, que data de 1561, se encuentra cerca de la iglesia del ‘Pouet’ de San Vicente, en la casa natalicia del santo, según informó José Miguel López, vicepresidente de la Junta Central Vicentina.

Y es justamente en la casa natalicia de San Vicente Ferrer donde se encuentra el último de estos llamativos y extraordinarios homenajes: un tapiz floral realizado en flores de sanguinaria, alhelí, manzanilla y claveles representa la figura del santo con hábito dominico y en asctitud de predicar. La imagen tiene 2.7 metros de altura y 2.5 metros de ancho y fue elaborado por el artista Miguel Galbis para la celebración del día de hoy.

Con información de AVAN y PARAULA. Fotos: A.Sáiz/AVAN