Cardenal jesuita Ghirlanda, nuevo Patrono de la Orden de Malta

El Cardenal jesuita de 80 años reemplaza al Cardenal Burke.

Cardenal Ghirlanda – Foto: Unigre.it

Redacción (19/06/2023 17:28, Gaudium Press) El Papa Francisco ha nombrado al cardenal jesuita Gianfranco Ghirlanda, como nuevo soberano de la Orden de Malta. El Cardenal Guirlanda trabajará junto con el Gran Maestre fray John Dunlap, elegido en mayo pasado, en el gobierno de la orden soberana.

El purpurado de 80 años sucede en el cargo de Patrono (Cardinalis Patronus) de esta orden de 13,500 miembros al Cardenal americano Raymond Leo Burke, de 74 años, quien era el Patrono desde el año 2014, cuando había concluido sus funciones como Prefecto del Tribunal de la Signatura Apostólica. El Cardenal Patrono es el representante del Papa ante la orden soberana y encargado de velar por los intereses espirituales de la orden.

El Cardenal Ghirlanda ya ha tenido relación con la Orden de Malta, cuando se piensa que jugó un papel relevante en la redacción de la nueva constitución de esta comunidad, que es a la vez orden religiosa y Estado soberano. El Cardenal Ghirlanda, canonista, fue creado cardenal en el 2022 y ha sido uno de los pocos que han sido hechos tales sin que antes fueran obispos sino solo sacerdotes.

Audiencia a Fray John Dunlap

El anuncio del nombramiento del Cardenal Ghirlanda, es concomitante con la audiencia concedida hoy también al Gran Maestre fray John Dunlap.

Algunos consideran al Cardenal Ghirlanda como el “canonista del Papa”. En entrevista el purpurado afirmó que su designación como cardenal la consideraba como “un reconocimiento indirecto al servicio a la Sede Petrina de nuestra universidad [la Gregoriana, de la que fue rector], pero también de la Orden de la que vengo, la Compañía de Jesús”.

No se conoce con qué función queda el Cardenal Burke. A algunos analistas ha llamado la atención que este cardenal no haya sido recibido en audiencia papal como es praxis. Este cardenal americano, uno de los cuatro firmantes de las “dudas” dirigidas a Francisco sobre la encíclica Amoris Laetitia, ha manifestado recientemente serios reparos al sínodo de la sinodalidad, e incluso ha afirmado que la deriva ocurrida con el reciente camino sinodal alemán puede propagarse a la Iglesia universal a través del sínodo de la sinodalidad.