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Francisco continuó sus catequesis sobre el celo apostólico.
Foto: Screenshot YouTube Vatican media
Redacción (20/09/2023 08:55, Gaudium Press) En la catequesis de la audiencia general de hoy, y continuando su serie sobre el celo apostólico, el Papa Francisco propuso el ejemplo de San Daniel Comboni, santo italiano del S. XIX, al final de su vida Obispo, que funda el Instituto de los Misioneros Combonianos y luego las Hermanas Misioneras Combonianas, poniendo así por obra su Plan de “salvar a África por medio de África”. Fue canonizado por San Juan Pablo II en el 2003.
De acuerdo al Pontífice, Comboni en África, a la luz de las enseñanzas de Jesús, tomó conciencia del mal de la esclavitud que “cosifica” al hombre. Y comprendió que hunde sus raíces en la esclavitud del corazón, “la del pecado, de la que el Señor nos libera”. El Papa recordó sus palabras en el encuentro con las autoridades de la República del Congo, el 31 de enero de este año, cuando habló de varios tipos de esclavitud que afectan a ese continente.
Recordó Francisco que San Daniel Comboni tras una primera estancia en África tuvo que abandonarla por motivos de salud, pero fue entonces cuando sintió la inspiración de emprender un nuevo camino de evangelización. “Una intuición poderosa”, subraya el Papa, lejos de la idea de colonialismo, que Comboni resumió con las palabras “Salvar África con África”: los pueblos a los que se dirigía el anuncio del Evangelio no eran, por tanto, sólo “objetos”, sino “sujetos” de la misión.
Continuó el Pontífice diciendo que el Santo “con este ánimo pensó y actuó de forma integral, involucrando al clero local y promoviendo el servicio laical de las catequesis. Los catequistas son un tesoro de la Iglesia: los catequistas son aquellos que van adelante en la evangelización. Concibió así también el desarrollo humano, cuidando las artes y las profesiones, favoreciendo el rol de la familia y de la mujer en la transformación de la cultura y de la sociedad”.
Francisco resaltó que la labor evangelizadora de San Daniel Comboni no sólo se apoyó en valores importantes como la libertad, la justicia y la paz, sino que “acudía al amor de Cristo y llevaba al amor por Cristo”. El fundamento de su misión fue la caridad hacia los hermanos y el amor a Cristo, que, como él mismo escribió, hace dulce el sufrimiento e incluso el martirio.
“Su deseo era el de ver misioneros ardientes, alegres, comprometidos: misioneros – escribió – «santos y capaces. […] Primero: santos, es decir ajenos al pecado y humildes. Pero no basta: es necesaria caridad que hace capaces los sujetos». La fuente de la capacidad misionera, para Comboni, es por tanto la caridad, en particular el celo en el hacer propios los sufrimientos de los otros”, dijo el Papa.
San Daniel Comboni, señala Francisco, invita también hoy a la Iglesia a no olvidar a los pobres y a los que llamó los “crucificados de la historia” y a amarlos “porque en ellos está presente Jesús crucificado, esperando resucitar”.
Con información de Vatican News
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