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El Arzobispo de Valencia quiso bajarle el tono a la confrontación. Pero las diversas fuentes sí afirman que hubo agresión, como interrupción de eucaristía.
Mons. González de Zárate – Foto: Wikipedia
Redacción (03/08/2023 11:11, Gaudium Press) Ha hablado el Cardenal venezolano Baltazar Porras, deplorando las agresiones de un general del ejército hacia Mons. Jesús González de Zárate, presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, y el equipo de Cáritas Venezuela.
El pasado 3 de julio, el arzobispo de Valencia y el equipo de Cártas atendían a personas afectadas por las fuertes lluvias y la crecida del río Manzanares en la localidad de Cumanacoa. El régimen Maduro había designado al genera Nayade Lockuiby como “autoridad única” de Cumanacoa, para la atención de esta emergencia, que había sido generada por el paso del huracán Beryl, pfrente a las costas venezolanas, y que había ocasionado más de 30.000 personas afectadas y varios fallecidos.
Ya el 15 de julio pasado, varios medios, como NTN 24, recogían el testimonio de personas que decían que “uniformados castrenses interrumpieron la homilía y advirtieron a González Zárate que el único autorizado para repartir ayuda a los afectados era el gobernante Nicolás Maduro”.
“Ante el asombro y los gritos de los feligreses, que oraban por Cumanacoa, los Guardias respondieron de manera insultante y la iglesia debió ser cerrada. Antes de retirarse, la GNB [Guardia Nacional Bolivariana] exigió a monseñor que se marchara del lugar, así como la organización Cáritas”.
Días antes, el 28 de julio, los obispos habían publicado una exhortación pastoral en vista de las próximas elecciones en Venezuela. Ahora el Cardenal Baltasar Porras, Arzobispo emérito de Caracas, ha relacionado la exhortación con los hechos de violencia contra el Arzobispo de Valencia.
Si una persona no está de acuerdo con el mensaje de los obispos, puede expresarlo pero no de “esa forma intempestiva y violenta” que no conduce a nada sino a “separarnos más, encresparnos más”, ha dicho el Cardenal.
Sobre el mayor general Lockiby, el cardenal dijo: “La autoridad única que está allí por todas las informaciones directas que hemos tenido no es la mejor”.
“Lo que ha pasado en Cumanacoa es algo insólito. Porque qué es lo que hace Cáritas y la Iglesia: de las ayudas que nos llegan de un lado y de otro es socorrer a la gente necesitada por estos deslaves, estas torrenciales lluvias. No hay razón para impedir lo que se está haciendo sin ningún tipo de proselitismo ni religioso ni político ni social”, expresó.
Mons. González de Zárate quiso bajarle el tono a lo ocurrido, diciendo que no sufrió ninguna agresión física, y que “sucedió un incidente desagradable, por lo que se hace necesaria una comunicación permanente y efectiva con las autoridades de la zona para evitar situaciones similares, que sólo perjudican a la población más necesitada”.
Sin embargo, las diversas fuentes confirmaron que tanto la eucaristía como la ayuda de Cáritas si se vio atacada por las fuerzas del Estado.
Con información de Aciprensa.
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