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Basra – Irak (Martes, 23-07-2019, Gaudium Press) La Iglesia de la Virgen María, en la ciudad de Basra, en Irak, fue reabierta.
El anuncio fue hecho por Mons. Alnaufali Habib Jajou, arzobispo caldeo de Basra.
Para la Agencia Asia News, sin esconder su alegría, Mons. Habib Jajou informó que esta iglesia fue construida al inicio del siglo XX y, por varias décadas, tuvo que ser cerrada y abandonada por causa de la inestabilidad e inseguridad por las cuales pasa el país.
El Arzobispo caldeo, comentando la reapertura de la Iglesia de la Virgen María, informó que el lugar de culto «reabrió solamente como un santuario», para permitir a los fieles «rezar a la Virgen María». Un lugar «abierto a todos» y al cual «todos tendrán acceso», sin distinción o prohibiciones.
Señal de esperanza
Los trabajos de construcción de la iglesia tuvieron su inicio en 1907 y ella fue inaugurada oficialmente en 1930. El lugar fue proyectado por arquitectos italianos, tomó la forma de una cruz romana y fue inspirada en una iglesia de Roma.
La Iglesia de la Virgen María acabó por tornarse Catedral de Basra (al-Qishla), substituyendo a una pequeña iglesia.
En los últimos días, las campanas de la iglesia volvieron a tocar, después de décadas en desuso y ya en estado de degradación.
Para el prelado, el hecho de poder ser posible la reapertura de la Iglesia «es una señal de esperanza para la población local».
El lugar, que ya acogió refugiados en los peores años de la guerra, es un punto de referencia para oración y acogida de fieles de la ciudad al sur de Irak.
Acogida de refugiados
Mons. Habib Jajou explica que, para Basra, la Iglesia es un importante lugar de culto. «De 1954 a 1971 el santuario fue usado como sede del obispado».
Fue la guerra entre Irak e Irán en la década de 1980 que llevó a la Iglesia a ser cerrada en 1981.
Ella fue «transformada en un campo de refugiados, acogiendo especialmente familias pobres», contando para eso con la colaboración de una asociación de caridad caldea.
A lo largo de los años, religiosas administraron la escuela de Al-Fayhaa, construida en el área adyacente a la catedral: 3.877 niños fueron bautizados.
Punto de referencia para la oración
Terminadas las reformas, la iglesia fue oficialmente reabierta al culto en el pasado mes de junio. En pocas semanas ya se tornó un punto de referencia para la oración y la acogida de los fieles de la ciudad.
Los cristianos locales enfatizan que esta reapertura permite no olvidar los muchos recuerdos que la catedral guarda en su interior, dice el Arzobispo de Basra, en Irak.
Basra
Basra es el centro más importante al sur de Irak y fue palco en el pasado reciente de graves violencias, que llevaron a la Iglesia a suspender todas las actividades extra-pastorales. Una situación crítica que caracterizó la historia reciente de todo el país y llevó a una caída drástica de la población cristiana, que pasó de 1,5 millón, en 2003, para los actuales 300 mil fieles.
(JSG)
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