Obispo de San Cristóbal, Venezuela, al Santo Cristo de la Grita: "¿Hasta cuándo vamos a soportar esta pesadilla que acogota al pueblo venezolano?"

San Cristóbal (Martes, 06-08-2019, Gaudium Press) Hoy, al Santuario Diocesano en la jurisdicción de San Cristóbal, Venezuela, miles de peregrinos acudieron a venerar la imagen del Santo Cristo de la Grita, imagen de 409 años de antigüedad a la que se le atribuyen origen milagroso y ocasión para que Dios derrame abundantemente sus favores. Es un Cristo Sufriente, moribundo.

La eucaristía fue presidida por Mons. Mario del Valle Moronta Rodríguez, Obispo de San Cristóbal, y concelebrada por el Nuncio Apostólico del Congo, Mons. Francisco Escalante, y el Obispo auxiliar de Mérida, Mons. Luis Márquez, además de numerosos presbíteros.

En su homilía, Mons. Moronta agradeció la iniciativa de fieles admiradores del Cristo, quienes recogen firmas para pedir al Episcopado Venezolano que esta impresionante imagen sea proclamada como «Protector de Venezuela», teniendo en vista de forma particular que la devoción a él crece y crece día tras día.

«Es un momento para reafirmar y renovar nuestra existencia marcada por el Bautismo, mediante el cual llegamos a ser el rostro de Cristo. Esto nos conduce a tener plena conciencia de que nuestra identidad es sellada por el mismo Señor Jesús», dijo Mons. Moronta.

El prelado, tras pedir a Jesús en la imagen del Cristo el respeto a la dignidad humana y a todos los derechos humanos, imploró también al Señor el fin de la terrible crisis que afecta a Venezuela: «Porque somos capaces de soñar sueños de libertad, te preguntamos ¿Hasta cuándo vamos a soportar esta pesadilla que acogota al pueblo venezolano?»

También imploró Mons. Moronta por la conversión del pueblo venezolano: «Tengo el sueño de ser el reflejo de tu rostro sereno -imploró Monseñor Moronta-. Tus discípulos lo pueden ser en el día a día de sus trabajos y acciones al actuar en tu nombre. Tengo el sueño de que, al hacerlo, podamos conseguir nuevos discípulos, recuperar a los entibiecidos e invitar a los hundidos en el fango del pecado a que se conviertan».

Al final de la misa, y en profundo clima de oración y agradecimiento por los favores recibidos, salió la imagen del Santo Cristo de la Grita en procesión, acompañado por miles de devotos.

Con información y fotos de la Oficina de Prensa de la Diócesis de San Cristóbal