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Washington (Lunes, 6-4-2020, Gaudium Press) Al inicio de una Semana Santa radicalmente diferente de las anteriores, en la cual los templos permanecen cerrados y los fieles deben permanecer en casa y unirse espiritualmente a la Liturgia que se celebrará a puerta cerrada, los Obispos de Estados Unidos convocaron a una jornada nacional de oración el próximo Viernes Santo. Invocando el Sagrado Corazón de Jesús, en cuyo honor los creyentes pueden orar una letanía para ganar la indulgencia plenaria, los prelados de país ofrecieron un mensaje de plena confianza en la misericordia y el amor de Dios.
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| La Iglesia en Estados Unidos se encomendará a la protección del Sagrado Corazón de Jesús. Foto: Formación Católica. |
«Las generaciones futuras recordarán esto como la larga Cuaresma de 2020, un momento en que la enfermedad y la muerte de repente oscurecieron toda la tierra», indicó la declaración emitida por el Presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB), Mons. José H. Gómez. «Pero sabemos que nuestro Redentor vive. Incluso en este momento extraordinario y desafiante, damos gracias por lo que Jesucristo ha hecho por nosotros por su vida, muerte y resurrección. Incluso ahora, nos maravillamos del hermoso misterio de nuestra salvación, cuán precioso es cada uno de nosotros a los ojos de Dios».
La declaración destacó las restricciones que obligan casi en todos los países del mundo a la Iglesia a dejar de celebrar públicamente como «tiempos casi sin precedentes en la larga historia de la Iglesia» y recordó que los Obispos son conscientes de la preocupación y dolor causados por la ausencia de los Sacramentos. «Esta es una aflicción amarga que todos sentimos profundamente. Nos duele con nuestra gente y anhelamos el día en que podamos reunirnos alrededor del altar del Señor para celebrar los misterios sagrados».
«El Viernes Santo, en nombre de los Obispos en los Estados Unidos, rezaré la Letanía del Sagrado Corazón de Jesús para que se ponga fin a la pandemia de coronavirus», anunció Mons. Gómez. «Les pido que se unan a mí en esta oración, que se transmitirá en vivo por Internet a las 9 a.m.en la costa oeste y a las 12 del mediodía en la costa este. Unámonos como una familia de Dios aquí en los Estados Unidos para pedirle a nuestro Señor su misericordia».
El Arzobispo expuso las condiciones para ganar la indulgencia plenaria concedida a quienes oran por el fin de la pandemia: «Para recibir esta indulgencia, deben rezar la Letanía del Sagrado Corazón el Viernes Santo, lamentarse verdaderamente por sus pecados y desear recibir el Sacramento de la Reconciliación tan pronto como sea posible, y deben rezar por las intenciones de Papa».
«En el corazón de Jesús, traspasado mientras colgaba de la cruz el Viernes Santo, vemos el amor de Dios por la humanidad, su amor por cada uno de nosotros», afirmó el Presidente de la USCCB. «Esta Semana Santa será diferente. Nuestras iglesias pueden estar cerradas, pero Cristo no está en cuarentena y su Evangelio no está encadenado. El corazón de nuestro Señor permanece abierto a todos los hombres y mujeres. Aunque no podemos adorar juntos, cada uno de nosotros puede buscarlo en los tabernáculos de nuestros propios corazones».
Mons. Gómez concluyó su mensaje recordando que el amor de Cristo no puede cambiar y se mantiene incluso en los momentos de prueba. «En estos misterios que recordamos esta semana, renovemos nuestra fe en su amor», expresó. «Y pidamos a nuestra Santísima Madre María que interceda por nosotros, para que nos libere de todo mal y nos conceda paz en nuestros días».
Con información de USCCB.
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