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Washington (Lunes, 13-04-2020, Gaudium Press) La pandemia de coronavirus y las severas restricciones impuestas por las normas de prevención del contagio han generado otro tipo de damnificados inesperados: miles de personas que participan en el Rito de Iniciación Cristiana de Adultos y que esperaban ser admitidos en la Iglesia Católica en la celebración de la Pascua. Ellos deben esperar a que la contingencia sea superada para poder participar en las celebraciones y recibir finalmente los Sacramentos.
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| Los catecúmenos esperan la superación de la pandemia para poder acceder a los Sacramentos de iniciación. Foto: The Catholic Virginian. |
«Tenía muchas ganas del sacramento y el hecho de que se retrasó, realmente no tengo palabras para ello», comentó a National Catholic Register Jean Paul Coiron, un converso de 21 años de edad proveniente de una comunidad presbiteriana y quien aspiraba a recibir la Eucaristía. «Es una gran decepción, pero, en última instancia, confío en el plan de Dios».
La celebración a puerta cerrada del Triduo Pascual ha impedido que los fieles accedan a los Sacramentos, y se podría esperar que las Solemnidades de Pentecostés (31 de mayo) o Corpus Christi (11 junio) puedan ser la ocasión de admitir a los candidatos. Sin embargo, esto dependerá de las medidas de prevención y el avance de la pandemia en los diferentes países.
El proceso de oración, estudio y discernimiento que los adultos deben completar antes de ser admitidos en la Iglesia normalmente encuentra su recta final en el primer Domingo de Cuaresma. En ese momento declaran públicamente su deseo de ser admitidos en la plena comunión de la Iglesia ante el Obispo, tras lo cual son llamados «elegidos» hasta el día en que reciben los Sacramentos de iniciación.
Con información de National Catholic Register.
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