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Shrewsbury (Lunes, 13-04-2020, Gaudium Press) En su homilía de Pascua, el Obispo de Shrewsbury, Inglaterra, Mons. Mark Davies, hizo un llamado a los fieles a fomentar la alegría cristiana fundada en la Resurrección, a pesar del dolor y la preocupación causadas por la pandemia de coronavirus. La lucha entre la vida y la muerte relatada en la Liturgia de la Pascua se vive de modo especial en la población que lucha contra la enfermedad y la muerte. «Recordemos que la esperanza de la Pascua en sí surgió de la cruda realidad del sufrimiento humano y la muerte de Cristo en la Cruz, y que sería escuchada primero por hombres y mujeres ‘autoaislados’ con miedo», indicó el prelado.
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| Mons. Mark Davies, Obispo de Shrewsbury, Inglaterra. Foto: Diócesis de Shrewsbury. |
«La proclamación de Pascua de la resurrección de Cristo es la esperanza en la que cada generación ha podido enfrentar el poder de la muerte», indicó Mons. Davies. Esta visión que alteró lo que la sociedad reconoce como bueno, por ejemplo la atención a los enfermos y vulnerables, así como la esperanza frente a la muerte, «no provino de una idea humana o una filosofía inventada: surgió de la victoria de la Cruz y Resurrección de Cristo que celebramos hoy».
El hallazgo de la tumba vacía hizo presente en el mundo la promesa de la Pascua, de la vida que supera a la muerte. Esta esperanza «es más necesaria que nunca hoy, cuando una pandemia global confronta a poblaciones enteras con nuestra vulnerabilidad y mortalidad». El prelado relacionó el temblor de tierra registrado durante la Resurrección con el cambio necesario en la sociedad, que puede aprovechar la oportunidad para servir, ser consciente de las propias limitaciones y recurrir al poder de Dios.
Mons. Davies expuso que la Catedral misma de Shrewsbury, en la que se detuvieron las labores de restauración, se convierte en una imagen de la vidas de los creyentes, que han tenido que detenerse y que esperan en medio de la incertidumbre. «Que estos tiempos de prueba nos inviten a regresar, al igual que aquí nos comprometemos más que nunca a completar la renovación de esta Catedral en toda su belleza, con lo mejor que podemos ofrecer al Señor», expresó.
«Que la inactividad forzada que marca estos días nos ayude a retroceder gracias a la mayor fuerza de fe, esperanza y amor sobrenaturales, para que en la lucha evocada en la celebración de Pascua entre la muerte y la desesperación, la victoria sea para todos promete vida», oró el prelado. «Que regresemos con renovado anhelo por la Sagrada Eucaristía; por una oración más profunda y un servicio sincero; por la gracia curativa de la Confesión, el sacramento de nuestra conversión después del Bautismo. De esta manera, salgamos de esta amarga lucha victoriosos con Cristo nuestro Señor, quien, en palabras de la Liturgia de Pascua, murió y, sin embargo, ‘reina viva por los siglos de los siglos’ Amén».
Con información de Diócesis de Shrewsbury.
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