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París (Lunes, 08-11-2010, Gaudium Press) En un patético «apelo a los hermanos de Francia,» los Obispos Católicos de Irak, imploran a los fieles de Francia que permanezcan con ellos, tras el brutal atentado ocurrido en la catedral de Bagdad la víspera del día de Todos los Santos
A continuación el documento entregado a la opinión pública por la Conferencia de Obispos de Francia:
Nuestro calvario es pesado, los testimoniamos, y nos parece largo. La carnicería perpetrada en la Catedral de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro en Bagdad, que mató al menos a 58 personas, incluyendo dos jóvenes sacerdotes, además de 67 heridos, nos causó un profundo estremecimiento.
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Una mujer llora durante el sepelio de una de las víctimas del atentado a la catedral sirio-católica en Bagdad |
Hemos perdido la paciencia, pero no perdemos la fe y la esperanza. El hecho de que un acontecimiento de esta magnitud haya ocurrido poco después de la realización del Sínodo de los Obispos, nos impactó más. Necesitamos de vuestras oraciones y vuestro apoyo moral y fraternal. Vuestra amistad nos alienta a permanecer en nuestra tierra, a perseverar y esperar.
Sin esto, nos sentimos solos y aislados.
Necesitamos de vuestra compasión ante todo lo que diga respecto a la vida de personas inocentes, cristianos y musulmanes. Permaneced con nosotros, hasta que el flagelo haya pasado.
Que el Señor nos proteja a todos.
El 2 noviembre 2010,
Mons. Athanase Matti Matoka, arzobispo de Bagdad de los Sirios
Mons. Louis Sako, arzobispo de Kirkut de los Caldeos
Mons. Emil Nona, arzobispo de Mosul de los Caldeos
Mons. Basile Georges Casmoussa, arzobispo de Mosul de los Sirios
Mons. Bashar Warda, arzobispo de Arbil de los Caldeos
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